94 años les separan. Casi un siglo en el que Manuel ha sumado a sus anécdotas de vida miles de partidas de ajedrez, mientras que Martín apenas está empezando a descubrir esta fantástica disciplina que enamora a aficionados de todas las edades. Sus caminos se cruzaron a mediados de septiembre en el distrito de Moratalaz por protagonizar, casi con total seguridad, la partida de ajedrez con mayor diferencia de edad entre rivales en un torneo.
Esta es su historia.
Cuando el Club de Ajedrez de Moratalaz decidió convocar el XXVI Torneo Internacional de Ajedrez de Moratalaz en colaboración con la junta municipal del distrito, nunca imaginó que se convertiría en noticia por ser privilegiado testigo de una partida muy especial. Manuel, 102 años. Martín, 8. Ambos entusiastas del ajedrez. Martín dice que se lo pasó muy bien en el torneo y que su partida con Manuel duró dos horas y media. Recuerda que le preguntó su edad. Manuel por su parte confiesa que Martín es muy bueno y así se lo transmitió. Ganó el veterano por un pequeño error del pequeño. El centenario le hizo saber que si seguía jugando así llegaría a Gran maestro.
Manuel, el centenario vecino de Moratalaz
Se llama Manuel Álvarez Escudero, está casado con María del Pilar (92) y ambos acaban de celebrar su cumpleaños el Día de la Fiesta Nacional. Hasta que se jubiló fue funcionario de la Seguridad Social, lo que antiguamente se conocía como Instituto Nacional de Previsión. Además del ajedrez, sus otras aficiones son jugar al dominó y a la pocha con sus amigos. En su vida cuenta miles de partidas de ajedrez y muchos torneos ganados. Si bien reconoce que ahora se despista y pierde piezas con mayor rapidez que antes, sigue residiendo en él un grandísimo campeón.
Lleva viviendo en Moratalaz desde hace 60 años y ha sido tesorero y presidente del Club de Ajedrez de Moratalaz muchísimos años. Hoy es presidente de honor del club. Lo que más le gusta del ajedrez son las amistades que ha hecho y sigue haciendo y la posibilidad que le brinda este deporte de relacionarse con todo tipo de gente sin distinción de sexo, edad, nacionalidad, etc.
El mensaje que deja para los que no son aficionados al ajedrez es que lo prueben y que, si no les gusta, no insistan porque es “un ejercicio mental muy duro que roba mucho tiempo”. A los que sí son asiduos a esta disciplina les pide que lo disfruten y que no se disgusten cuando pierdan porque no deja de ser un juego. “Lo importante es sacar conclusiones positivas para la siguiente partida”, dice.
Martín, precoz amante del ajedrez
Martín Courrieu es francés y apenas lleva viviendo un año en España con sus padres y su hermana. Estudia tercero de primaria en el Liceo Francés Saint-Exupéry de Alcobendas. Practica rugby y tenis de mesa, además de ajedrez. Descubrió las reglas de este deporte cuando su padre les enseñó a jugar a su hermana mayor y a él en las vacaciones de 2019 y 2020. Pero cuando aprendió a jugar verdaderamente, lo hizo solo y con ayuda de vídeos en una plataforma online.
Cuando llegó a España pidió a sus padres ir a un club para seguir aprendiendo y sus progenitores Olivier y Geraldine le apuntaron al Club V Centenario en San Sebastián de los Reyes. Allí estaba esperándole su “súper profe Juan Carlos”, como le califica Martín, y es el lugar donde ha hecho amigos como Alejandro, Iván, Juan, Pablo y Omar.
Calcula que habrá jugado entre 50 y 100 partidas y ya ha participado en unos diez torneos. “Me divierte jugar”, dice convencido este pequeño de ocho años. Confiesa que le gusta más jugar con menores de 12 o mayores de 40 porque las partidas son menos duras y competitivas. En el caso del Open de Moratalaz, le gustó porque dice que estaba muy bien organizado y ama las partidas lentas con todas las edades. Disfruta tanto, que un día organizó un torneo con amigos en su propia casa. Martín lanza un mensaje a los niños que no conocen el ajedrez y les invita a jugar porque “se van a divertir”.
Renacimiento del Club de Ajedrez de Moratalaz
Esta partida intergeneracional se suma a un año muy especial para el Club de Ajedrez de Moratalaz, tal y como nos cuenta su presidente, Luis Mansilla, pues después de muchas temporadas, un grupo de aficionados ha conseguido recuperar este club y con él, el open que llevaba demasiado tiempo sin convocarse. Se notan las ganas cuando hablan de su proyecto y nos cuentan sus objetivos.
El Club de Ajedrez de Moratalaz está muy ligado al distrito. Participan en el programa organizado por la junta municipal La Velada + Joven, organizan torneos con motivo de las fiestas del distrito y, además, su sede está en un local cedido por la propia junta.
El ajedrez no es cosa de edad. Manuel y Martín son el ejemplo. No hay excusas para no interesarse por una disciplina que cada vez cuenta con más aficionados en todo el mundo. ¡También en Moratalaz!