Entre 1.000 propuestas presentadas a los Premios Rock Villa de Madrid 2025, el artista Paco Pecado fue proclamado ganador por un jurado de especialistas en música actual. El autor de Cachito de pastel, canción que acumula más de 350.000 reproducciones en plataformas digitales, viene pisando fuerte con una fusión “entre lo kitsch, lo retro y lo vetusto”, como él mismo se autodefine. Su mezcla de estilos y personalidad le hacen realmente inclasificable y atractivo para diferentes públicos, ya que su música abarca desde una aura setentera, hasta ritmos electrónicos, pasando por el clásico tango o canciones con alma verbenera.
Entrevistamos a Javier Morales, nombre real de Paco Pecado, que publicó el pasado mes de marzo su primer LP titulado Entre bodegas y ferias y que presentará el sábado, 10 de mayo, en el escenario de los Jardines de Las Vistillas dentro de la programación de San Isidro, por primera vez junto a su banda LXS PECADORXS. La entrega de Premios Rock Villa de Madrid 2025, galardones que han llegado ya a su 45 edición, contará también con las actuaciones de Cryymm y mariagrep, segundo y tercer premio del certamen, y de Cholo Chicha y Las Dianas, artistas galardonados con el Premio AIE y el Premio Radio 3, respectivamente.

Raffaella Carrá para verbena nocturna y, Raphael, para diurna
Paco Pecado nos destaca que, para él, ganar los Premios Rock Villa de Madrid 2025 “es un honor tremendo, es uno de los premios de música más antiguos de Madrid (si no es el más antiguo). Y no sé si en España hay un concurso musical que lleve tantas ediciones.” El artista recalca que lo han ganado bandas y proyectos icónicos que, además, le han gustado mucho, como Novedades Carminha o La M.O.D.A., en ediciones recientes, o El Gran Wyoming o Los Nikis, años atrás. “Seguir la estela de tus referencias es un orgullo”, subraya el artista. De este gran palmarés de galardones y conciertos, Paco Pecado nos confiesa que le habría gustado ver a la banda de post punk de los ochenta Derribos Arias. Y es que la Movida Madrileña tiene influencia en la música del artista, pero también la balada romántica al estilo Julio Iglesias o Joan Manuel Serrat, o la figura de la icónica Raffaella Carrá, a quien dedica la canción Raffaella. En esta composición, el artista canta “yo soy más de Raffaella que de Raphael”. Aprovechamos para preguntarle a quién se llevaría a una verbena de día y a quién a una de noche, y sin dudarlo nos responde que Raphael para el plan diurno y, la italiana Carrá, para el nocturno. Pocos planes más madrileños para San Isidro que una verbena, en la que podrían sonar perfectamente Jaranera o Cumbia del pecador, temas de su primer disco.
En su canción Chicx, dice aquello de que “de ti me he enamorao, no sé cómo ha pasao, si era más de Marbella que de Bilbao”. Con un estilo entre el folclore y el “neoverbeneo”, Paco Pecado podría encajar de maravilla con artistas de la escena nacional como Rodrigo Cuevas o Carlangas, proyecto en solitario del cantante de Novedades Carminha, quienes también fueron galardonados en los Premios Rock Villa de Madrid en su 34ª edición. “Al primero me lo llevaría a Marbella, me respira esa actitud del sur, aunque sea asturiano, y al gallego Carlangas, a Bilbao, lo veo más del norte, más rockero”.

La librería más antigua de Madrid: el rincón favorito de Paco Pecado
Canciones sobre la ciudad de Madrid hay muchas, pero Javier Morales-Paco Pecado se queda con dos. “Últimamente estoy escuchando una de Muerdo, Ay Madrid. Y aprovechando que en la rueda de prensa de la presentación de fiestas de San Isidro vino a cantar Marina Carmona, digo Vente pa’ Madrid.” La canción, compuesta por Ketama, grupo de los hermanos Antonio y José Miguel Carmona, es una de las favoritas de Paco Pecado.
¿Vermú o mini? ¿Calamares o rosquillas? ¿Zarzuela o chotis? El artista se queda con vermú, calamares y zarzuela. Un buen combo para terminar en el rincón favorito de Madrid de Paco Pecado: la librería Pérgamo, la más antigua de Madrid.
Tal y como empieza su canción Tango del clavel: “con un clavel en la mano, te sigo esperando”, esperamos que dedique esos románticos versos a los chulapos, madrileños, amantes de la verbena, de Raffaella, de los calamares y el vermú, que asistan a su actuación en Los Jardines de Las Vistillas.