Ni por un casual te habrías imaginado ver una película pedaleando sobre una bici, sin enchufes de ningún tipo. Esta original y sorprendente propuesta amigable con el medio ambiente se sirve de una combinación de ejercicio saludable y cultura mediante la utilización de una energía renovable.
Cine a golpe de pedal
Así es el proyecto Cinecicleta: un sistema de proyección cinematográfica a través del pedaleo continuo del público asistente a la sesión, al que se han sumado los CIEA Dehesa de la Villa, El Huerto del Retiro y el CEAC Maris Stella. La sala se enciende al anochecer y, pedaleando por turnos, la magia se hace realidad sobre una pantalla.
Este ingenio fue creado por Carmelo López, profesor de natación y robótica e Isabel Segura, Ingeniera de Montes. Este par de aventureros, amantes del cine, comprometidos y apasionados por la bicicleta y con ganas de viajar y compartir, concibieron Cinecicleta como un proyecto cultural, social y tecnológicamente sostenible que comenzó a desarrollarse en una travesía por el continente africano con el fin de llevar la cultura del cine a todos esos rincones donde sentarse ante una pantalla proyectora de imágenes no forma parte de su cotidianidad y es un hecho que constituye una proeza. Partiendo de Madrid con destino a Madagascar, la bicicleta recorrió estos territorios durante dos años con este pequeño cine ambulante a cuestas y un objetivo: exhibir películas, cortos y documentales en lugares localizados en la travesía de su periplo bicicletero.
Una programación comprometida con valores humanos y sostenibles
Este proyecto persigue la sensibilización sobre diferentes temáticas y valores a través del cine, a la par que abrir espacios de debate y reflexión a partir del poderoso componente de cultural, social, político y artístico del fenómeno cinematográfico.
El cartel de películas que se proyectan a pedal comienza con un corto de 10 minutos y un documental de Juan Laguna, ‘Princesa de África’, en el CIEA Dehesa de la Villa (9 de septiembre). Marem, una adolescente senegalesa, y Sonia, una bailarina española atraída por la magia de África, se dan cuenta de que ni África es como Sonia soñaba ni Europa es como Marem anhelaba.
‘África en cinecicleta’, de Juan Zavala, es la película que podrás ver pedaleando en el CIEA El Huerto del Retiro (16 de septiembre). Es el diario de un viaje de dos años en el que los dos protagonistas, Isabel y Carmelo, recorrieron África en bicicleta organizando sesiones de cine gracias a su singular sistema de proyección.
En el CEAC Maris Stella (23 Septiembre), además del corto, podrás ver: Made in Spain (Coke Riobóo), Binta y la gran idea y Bienvenidos, ambas de Javier Fesser.
Puedes consultar horarios y apuntarte contactando directamente con cada Centro.
Objetivo: llevar el cine al fin del mundo… en bicicleta
La cinecicleta se propone llegar al fin del mundo, promoviendo y reivindicando el uso de energías limpias y renovables, además de proporcionar un espacio de ocio a la población local que les permita ver películas.
Así pues, la colaboración en la igualdad de acceso a la cultura para todos los ciudadanos del globo ha sido uno de sus principales planteamientos. En su periplo por tierras africanas, la aventura cineciclética llegó a convertirse en una labor tan necesaria y humanitaria como para suplir esta carencia, llevando películas del cine mudo y grandes éxitos de Charles Chaplin y Buster Keaton a la aldea más recóndita. Anécdotas curiosas como la de los niños que tocaban la pantalla tratando de averiguar dónde estaban y de dónde salían las personas que vieron proyectadas, las emociones que Isabel y Carmelo observaron en la gente que contemplaba una película por primera vez es algo que permanecerá siempre en su memoria.
Una sencilla infraestructura
La cinecicleta no requiere de infraestructura sofisticada alguna, ni precisa enchufarse a la red eléctrica, tan sólo la disposición de pedalear para visualizar la proyección. En palabras de sus artífices, es una instalación tan versátil, que puede proyectarse tanto en un salón de actos, como en una plaza pública, en un rincón del barrio o en un pequeño bar. Sólo se necesitan los siguientes elementos: un generador a pedales, la caja de conexiones-altavoz-reproductor multimedia, cables de conexión, un proyector LED, una pantalla y… oscuridad.
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