La moda es considerada un fenómeno cíclico y cambiante en nuestra sociedad. Nada tiene que ver la ropa que veíamos en las pasarelas y en las calles en los años 90 con las tendencias en moda de principios del siglo XXI o con lo que hemos vestido el pasado verano. Reflejo de esta continua transformación es el desarrollo que ha tenido desde su nacimiento la Mercedes-Benz Fashion Week Madrid, el mayor escaparate de promoción de la creación textil española que ha cambiado de ubicación y de nombre en numerosas ocasiones. Vamos a hacer un recorrido por la historia de la pasarela para conocer qué se cuece, o mejor dicho, ‘se cose’ en esta cita imprescindible con la moda y el diseño español.

Una edición híbrida

Llega una nueva edición, ¡y van 72!, de la gran pasarela de la moda española. Hasta el 13 de septiembre, el pabellón 14.1 de IFEMA y otros escenarios de la capital acogen la Mercedes-Benz Fashion Week Madrid (MBFW Madrid), donde conoceremos las tendencias de la próxima temporada primavera/verano 2021 a través del trabajo de 16 diseñadores consagrados y nieve jóvenes talentos que forman parte del programa Samsung EGO.

En esta ocasión, la situación generada por la COVID-19 también afecta al desarrollo de esta semana de la moda de Madrid, que se celebra bajo estrictas medidas de seguridad y control de aforo. En este sentido, lFEMA, organizadora del evento, ha realizado un verdadero esfuerzo e inversión en protocolos y medidas para que se pudiese celebrar de manera presencial. Así, por primera vez en sus 72 ediciones, la pasarela se desarrollará en un formato híbrido, con desfiles presenciales que se alternarán con performances y fashion films.

Por eso, aunque la esencia de ser la mayor expresión y escaparate internacional de la moda española se mantenga intacta, las medidas de aforo y seguridad tomadas por la pandemia harán que la pasarela sea muy diferente a la de años anteriores. Desde luego, poco tiene que ver esta edición de la MBFW Madrid con la primera pasarela de moda que se celebró hace 35 años.

Diferentes emplazamientos

En febrero de 1985, seis diseñadores afincados en Madrid, Roberto Verino, Jesús del Pozo, Manuel Piña, Antonio Alvarado, Jorge Gonzálvez y María Moreira, impulsaron un evento de moda para mostrar sus creaciones. La cita se celebró en una carpa de circo alquilada a Teresa Rabal situada en la plaza de Colón.

En la siguiente edición, la convocatoria tuvo lugar en un escenario más formal, el Museo del Ferrocarril de la antigua Estación de Delicias y el número de participantes fue en aumento. Aquí ya desfilaron las creaciones de Sybilla, Juanjo Rocafort, Roberto Verino o Adolfo Domínguez.

Estas incorporaciones hicieron que la pasarela fuese ganando fama como plataforma de promoción para los profesionales de la moda que vivían en Madrid. Comenzaba a tomar cuerpo la Marca España en lo que a moda y sector textil se refiere, por lo que la organización del evento buscó nuevas localizaciones, más amplias y profesionales. Así, el siguiente año y durante varios más las colecciones de los diseñadores se presentaron en el recinto ferial de la Casa de Campo, un espacio bien equipado pero algo alejado del centro de Madrid. Fue la época en la que se sumaron algunos de los grandes nombres de la moda española, de los que podríamos decir son los auténticos clásicos de la pasarela, como Victorio & Lucchino, Ángel Schlesser, Ágatha Ruiz de la Prada o Roberto Torreta.

Llegada a IFEMA

Pero la pasarela se volvió a trasladar a un nuevo lugar: el Palacio de Congresos y Exposiciones de Madrid. Por fin, en 1995, llegó hasta el lugar donde se celebra en la actualidad, el recinto ferial del IFEMA, entidad que se hizo con las riendas de la organización en 1996, aunque en este tiempo se mudó en dos ocasiones al Paseo de Coches de El Retiro.

Cibeles Madrid Fashion Week 2010
Cibeles Madrid Fashion Week 2010

 

Hoy en día, la Fashion Week de Madrid se celebra en un espacio de más de 14.000 metros cuadrados, con dos pasarelas y el llamado Cibelespacio, que reúne las diferentes firmas patrocinadoras del evento. Aquí se vive la moda de manera diferente, incluso con grandes dosis de espectáculo: antes y después de cada desfile, la zona es un hervidero de personas apasionadas de la moda y el diseño, con estilismos de lo más variados que buscan el mejor lugar donde lucirse y posar para compartir sus fotos en redes sociales.

De Cibeles a la MBFW Madrid

Este periplo por encontrar el escenario más adecuado para la exhibición de los diseños de nuestros creadores no ha sido el único cambio que ha vivido la pasarela. También la denominación del evento ha variado a lo largo de su historia.

La Mercedes-Benz Fashion Week de ahora nació como Pasarela Cibeles y más tarde, en 2008, pasó a llamarse Cibeles Madrid Fashion Week. Así la conocíamos hasta que en 2012 la empresa automovilística Mercedes-Benz se convirtió en patrocinador principal, lo que supuso una importante inyección económica, además de impulsar la dimensión internacional del evento al formar parte del portfolio de pasarelas internacionales patentadas por la casa alemana como Nueva York, Berlín, México o Pekín.

Madrid, capital mundial de la moda

En cada cita de la semana de la moda que se celebra en Madrid, el panorama internacional del diseño y la creación textil tiene sus ojos puestos en nuestra ciudad. Aunque no sucede en esta edición debido a la excepcionalidad que vivimos por la COVID-19, desde hace años el evento no solo se vive en las instalaciones de IFEMA, sino que alcanza varios escenarios de la capital. Así sucedió en su última cita, el pasado mes de febrero, cuando el Ayuntamiento de Madrid quiso llevar la pasarela a algunos de los principales centros culturales de la ciudad como Conde Duque, CentroCentro, el Pabellón de Cristal o la Casa de la Panadería, donde se exhibieron las colecciones de varios diseñadores. El Consistorio considera que esta iniciativa de llevar los desfiles a puntos más céntricos de la ciudad sirve de acicate para atraer al turismo y promocionar la ciudad en el exterior.

La MBFW Madrid se ha convertido en un importante evento para la proyección de la ciudad. Pero no es la única actividad que se desarrolla con este fin. Estos días también se celebra una nueva edición de Madrid es Moda, una iniciativa que forma parte de Madrid Capital de la Moda, el proyecto del Ayuntamiento de Madrid, a través del Área de Economía, Innovación y Empleo y de la Dirección de Comercio y Emprendimiento, en el que colaboran entidades públicas y privadas con conceptos novedosos para poner la moda al alcance de toda la ciudadanía.

Bajo el paraguas de Madrid Capital de la Moda se aglutinan todos los eventos y actividades relacionados con el mundo de la moda, belleza, arte, decoración, gastronomía y estilo de vida en general que se celebran en la capital y que hacen de ella una de las ciudades más activas y dinámicas.

Madrid es Moda, en el que participa la Asociación de Creadores de Moda de España (ACME) y el Foro de Empresas de Madrid, ha presentado diversas iniciativas para promocionar la ciudad destacando la calidad, autenticidad, sostenibilidad y cultura social de la industria de la moda.

Moda en tiempos de coronavirus

Lo que está claro es que la moda se transforma continuamente, se adapta a los tiempos y al consumo y se reinventa. Y hoy en día, estas premisas tienen mucho sentido y razón de ser. La crisis sanitaria y económica generada de la COVID-19 ha hecho que el sector textil sea uno de los más afectados. Por eso, es necesario echar mano del talento creativo, la espontaneidad y la frescura de los diseñadores y favorecer la tecnología y la digitalización de las empresas de la industria textil y sus canales de ventas.

En cuanto a las tendencias, habrá que prestar atención a los desfiles para saber si llevaremos más rayas o cuadros; cuál será el color Pantone oficial que más se verá la próxima temporada o si la mascarilla se combinará con el resto de nuestro vestuario… porque la moda no se detiene ante la pandemia, se hace más real y sin artificios.