Escuelas infantiles, colegios e institutos de Madrid cerraron sus instalaciones el 11 de marzo con motivo del desarrollo de la pandemia de la COVID-19. Desde entonces docentes y alumnado han tenido que adaptarse a nuevos métodos de enseñanza en la distancia.
Para valorar el impacto de la situación de confinamiento en la población, el Ayuntamiento de Madrid ha llevado a cabo una encuesta en 1.566 hogares en la que ha preguntado, entre otros temas, por los efectos del confinamiento en el desarrollo educativo de sus hijos.
El 70,9% de los hogares encuestados cree que la actual situación, con las clases presenciales suspendidas, afectará de forma negativa al aprendizaje de los menores, aunque la mayoría de los centros educativos, un 93,3% según refleja la misma encuesta, están haciendo un seguimiento de las tareas y el aprendizaje del alumnado virtualmente. El 27,1% restante estima que estas medidas extraordinarias no dificultarán la trayectoria educativa de los menores que tienen a su cargo.
Esta preocupación va en aumento a medida que la edad de los menores sobre los que se pregunta crece. Así, mientras que los padres y cuidadores principales de los menores en la fase de educación infantil (hasta los tres años), manifiestan preocupación en un 50% de los casos, en la fase de primaria (a los seis años), los que se encuentran preocupados son ya más del 60%, y de secundaria (pasados los 11 años), el 70%.
La encuesta, llevada a cabo por el Área de Familias, Igualdad y Bienestar Social, se realizó de forma telefónica entre el 13 y 23 de abril.
Apoyo educativo
Desde el principio del confinamiento el Ayuntamiento de Madrid ha venido desarrollando actuaciones destinadas a apoyar la faceta educativa de los menores con programas como ‘Quedamos al salir de clase’ o convenios como el de Cruz Roja de apoyo escolar. También el programa municipal de prevención del absentismo se ha adaptado al nuevo contexto, realizando el seguimiento de las familias y menores de forma telefónica o WhatsApp.