Ayudar a las familias madrileñas a resolver pequeños problemas de la vida cotidiana, y favorecer la creación de redes sociales basadas en la ayuda mutua y la solidaridad: estos son los objetivos del Banco del Tiempo del Ayuntamiento de Madrid, en el que toda la ciudadanía puede participar.

¿Eres un manitas haciendo reparaciones del hogar o dominas idiomas para ayudar a otras personas a aprenderlos?, ¿tienes tiempo para acompañar a niños al colegio o puedes dar clases de pintura? Son solo algunos ejemplos de la cantidad de cosas que podemos compartir cuando ofrecemos nuestro tiempo a los demás.

El Banco del Tiempo es un sistema de intercambio de servicios, conocimientos y cuidados por tiempo. La moneda de intercambio es la hora, independientemente del servicio que se ofrezca o se reciba. Se trata de un proyecto presente en todos los distritos a través de los Centros de Apoyo a las Familias (CAFs).

En Madrid existen un total de 7 CAFs y por tanto, 7 bancos del tiempo. Dependen del Área de Gobierno de Equidad, Derechos Sociales y Empleo; y de la Dirección de Familia e Infancia, que es quien coordina este programa al que todo el mundo puede acceder si reside en el municipio de Madrid, es mayor de edad y acepta las normas de funcionamiento.

Pero, ¿qué se puede intercambiar?

Infinidad de cosas, entre ellas las relativas a la atención a personas: cuidado de mayores o acompañamiento de niños al colegio, hacer la compra, realizar gestiones o recados que nos es complicado o imposible por horarios o cualquier otra circunstancia. También podemos ofrecer nuestro tiempo si tenemos conocimientos de bricolaje, costura, cocina, o se nos da bien el cuidado de animales y plantas.

En los bancos del tiempo también podemos ofrecer aspectos relacionados con el cuidado del cuerpo y de la salud si nos dedicamos a ello: cuestiones como el cuidado del cabello, relajación, maquillaje, reflexología tienen cabida en el banco del tiempo; o bien lo relacionado con la informática o los idiomas, sin olvidar por supuesto lo relativo a formación con ayuda en los deberes o clases de todo tipo.

Si te ha llamado la atención y crees que puedes “intercambiar tus horas”, debes saber que los bancos de tiempo funcionan de forma parecida a los bancos convencionales. Primero deberás abrir una cuenta de horas explicando los servicios y conocimientos que ofreces y lo que esperas recibir. Cada vez que prestes un servicio, irás acumulando horas en tu cuenta, que podrás canjear por otros servicios cuando lo necesites.

Para participar en el banco del tiempo es necesario contactar con tu CAF territorial según distrito, y realizar entrevista. Así que, ¡no esperes más y decídete a compartir tu tiempo con los demás!