Este sábado se celebró el Día Internacional contra la Violencia hacia las Mujeres, un 25N que el Ayuntamiento aprovechó para presentar el callejero ‘Madrid libre de violencias machistas’. La delegada del área de Políticas de Género y Diversidad, Celia Mayer, inauguró la obra ‘Agua’, que consiste en la transformación artística del túnel que llega al parque del Retiro. Ésta es la primera de una serie de intervenciones artísticas que se desarrollarán a lo largo del próximo año y para demostrar que en las ciudades existen multitud de espacios públicos que resultan inseguros para las mujeres y transformarlos en espacios seguros y libres de acoso, miedo y discriminación.

Los transeúntes que cruzaban el túnel este sábado paseaban a lo largo de una piscina. «Por unos minutos, nos acercamos a una realidad alternativa que permite la evasión del cuerpo y de la identidad, surgiendo un fluir espontáneo cargado de libertad, trasladando a quien camina por la instalación a un estado de bienestar” (Trinidad Irisarri, autora).

“Queremos visibilizar que además de la violencia que sufren las mujeres con su pareja o su ex pareja, de la violencia doméstica, hay otros tipos de violencia contra las mujeres. Una de ellas es la que se sufre en el espacio público. En Madrid a día de hoy existen aparcamientos subterráneos, descampados a los que no son atrevemos  atravesar por miedo a ser agredidas”, dijo Mayer que no quiso dejar de recordar a las mujeres asesinadas este año, en concreto a los asesinatos de cuatro víctimas y al bebé de una de ellas producidos en Madrid. 

Para recordar a las mujeres acosadas que no están solas se ha lanzado la campaña ‘Barrios por los buenos tratos’, una iniciativa que va dirigida a todas las comunidades de vecinos y vecinas de la ciudad de Madrid. No va dirigida explícitamente a las víctimas, ni a los agresores, sino al entorno. A las personas que potencialmente pueden ayudar, vecinos y vecinas, familiares, comercios de proximidad. A todos los colectivos para que seamos testigos y denunciantes, actuantes contra esta lacra.

Además de intervenciones puntuales Madrid ha pedido el ingreso a la Red de Ciudades Seguras y poder compartir políticas desde una perspectiva de género.