El pasado martes 10 de mayo de este 2016, en torno a las 18:30 de la tarde, nos reunimos.
Al final llovió.
Habíamos confiado durante la semana anterior en que no lo haría, por eso la reunión para pensar el futuro de La Cebada iba a desarrollarse en El Campo, al aire libre, sentados en sillas de terraza recuperadas, gradas de maderas viejas, en el suelo donde años atrás hubo un frontón. Pero llovió, llovió muchísimo. Y preparamos todo en una sala del Mercado.
El pasado martes 10 de mayo de este 2016, en torno a las 18:30 de la tarde, durante aproximadamente dos horas y en una sala lateral del Mercado, muchos vecinos y vecinas de La Latina nos juntamos para pensar La Cebada.
Entre ellos pudimos reconocer a asociaciones de vecinos, gente que no representaba a nadie, representantes de inmobiliarias, concejales de la Junta, mercaderes, madres y padres del distrito que participan en las AMPAS del barrio, gente muy joven y otros muy viejos, urbanistas, gerentes, directores de Planeamiento, activistas, gente del barrio nacida en muchos lugares diferentes, mucha gente, más gente que sillas.
Era la primera vez que la Junta de Centro convocaba de forma abierta a los vecinos para informarles de sus planes sobre La Cebada. En otras ocasiones siempre nos enterábamos por la prensa.
Era la primera vez que la Junta de Centro convocaba a las vecinas de La Cebada además, para expresar su deseo de diseñar un pliego de condiciones que ensamblara las opiniones de la gente del barrio. Jamás nadie antes nos preguntó nuestra opinión.
También fue la primera vez en la que se expresaba públicamente que ese pliego quiere aprender de todas las experiencias que desde el día que se cerró la piscina se han puesto en juego en el barrio. Las protestas, los mercados, los eventos, las reivindicaciones, los deportes, las plazas, las discusiones, las opiniones y sobre todo las propuestas.
Esperemos que todas las asociaciones y colectivos del barrio podamos canalizar el mayor número de sensibilidades y opiniones sobre este tema. Convertirnos en altavoces de los vecinos, sobre todo de los que piensan distinto a nosotros.
Primero nos explicaron los responsables de la Administración.
Por lo visto se quiere rehabilitar La Cebada, y se quiere hacer de forma rápida. Piensan en un Mercado que recupere su condición de mercado público frente al que ahora está proyectado, en un polideportivo con piscina y en un espacio al aire libre de cogestión ciudadana. Durante el próximo mes quieren recibir las propuestas de todos los vecinos y diseñar un pliego para al Área de Desarrollo Urbano Sostenible, conjugando el máximo número de opiniones. Al mismo tiempo se quiere volver a cambiar la normativa urbanística y devolver la condición de público al suelo de toda La Cebada, para ello Urbanismo quiere empezar cuanto antes y se considera que el trámite tardará un mínimo de seis meses desde que se empiece.
Después llegó lo más interesante.
Tomó la palabra la gente. Y se demostró la disparidad de opiniones, la capacidad que tienen los vecinos de enriquecer procesos, la falta de certezas universales y el buen caldo de cultivo que existe en el barrio para pensar un lugar así entre muchos. Pero mejor que hacer un resumen, os enseñamos directamente algunas de las palabras que se tomaron.
“(…) no estoy en absoluto de acuerdo con la opinión de mantener este edificio, porque este edificio estéticamente no hay por donde cogerlo, es muy agresivo (…)”
“Bueno, yo soy vecino del Madrid decadente (aplausos y risas). Quería en primer lugar, pues respaldar totalmente lo que ha dicho el compañero de mantener este edificio, que es algo en lo que yo creo que hay un acuerdo (…)”
“(…) Si tan seguros estamos de las necesidades que tiene esta dotación, no veo el motivo por el que se debe abrir un proceso de consulta (…)”
“(…) ya digo que no vamos a hacer un proceso de participación como plaza España o como algún otro, porque yo creo que hay consensos básicos y tenemos que ir rápido. Y evidentemente luego lo que hay son los problemas de planeamiento (…)”
“(…) ¿cuánto tiempo se va a prolongar la fase de consulta? Una vez cumplida la fase de consulta, qué tiempo va a llevar la legislación y la planificación (…)”
“Una vez que se sepa que es lo que se quiere hacer en el Plan Especial son nueve meses de tramitación. Y son nueve meses que son necesarios para iniciar obras que contravengan o que no desarrollen lo que ahora mismo permitiría el Planeamiento. Lo que ahora mismo permitiría el planeamiento sería alterar toda la configuración de este edificio y del Campo de la Cebada (…) con un proyecto de edificación se puede empezar a intervenir sobre este edificio pero es ineludible alterar las condiciones de Planeamiento porque si no, no puede haber un proyecto municipal que incumpla una legalidad que está establecida”.
“(…) devolver el protagonismo a los vecinos, más que a todas las personas que vienen de forma puntual sobre todo en las fiestas y en los fines de semana. Entonces una idea que puede ser muy bonita (…)”
El pasado martes 10 de mayo de este 2016, en torno a las 20:30 horas aproximadamente, tras pasar dos horas largas en una sala, muchos vecinos y vecinas de La Latina salimos del Mercado después de haber pensado juntos el futuro de La Cebada.
La verdad, no salimos con una idea clara de lo que va a ocurrir, ni cuándo va a ocurrir realmente. Algunos se fueron esperanzados, otros decepcionados, algunos muy contentos, seguro que algunos enfadados. Pero todos nos fuimos después de haber pensado juntos en un espacio abierto. Ojalá sigamos pensando así La Cebada, ojalá lo que siga siendo este espacio de La Latina siga siendo así, un espacio plural y de todos, y sobre todo un espacio abierto al barrio.