Madrid apuesta por la movilidad sostenible y ya cuenta con una ordenanza de movilidad que mejorará la calidad del aire cambiando la velocidad a la que podrán circular nuestros vehículos por las calles de la capital.
A partir de ahora, Madrid será una ciudad “a 30” pues la nueva ordenanza aprobada modificará el límite de velocidad del 85% de las calles de un solo carril por sentido o de carril único, que se reducirá de 50 a 30 km/h. También experimentarán este cambio algunas calles de doble sentido tras un análisis de seguridad vial de la zona. En el caso de zonas de plataforma única, es decir las denominadas calles de coexistencia, el límite será de 20 km/h.
¿Por qué se reduce la velocidad a 30 km/h?
El objetivo de esta medida es pacificar el tráfico viario e incrementar la seguridad vial de peatones y conductores de todo tipo de vehículos. La reducción también contribuye a facilitar el uso de la bicicleta.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) el riesgo de muerte en un atropello es ocho veces más alto a 50 km/h, que si se produjera a 30 km/h. A partir de esta velocidad, el riesgo de morir o de sufrir lesiones graves aumenta significativamente además de elevar las probabilidades de sufrir un accidente. En un atropello a 64 km/h el 85% de los peatones mueren; a 48 km/h el 45%, mientras que si la velocidad es de 32 km/h sólo fallecen el 5%.
Madrid se suma así a la lista de ciudades que tienen “zona 30” en la mayor parte de sus calles. Es el caso de Bilbao, Barcelona o Bristol, que han reducido la velocidad de un elevado porcentaje de sus calles.
Plan A y Madrid Central
Esta es una de las medidas más importantes de la nueva ordenanza, en la que se recoge el Plan A de Calidad del Aire y Cambio Climático, la estrategia de movilidad sostenible del Ayuntamiento, que pretende garantizar la salud de los madrileños, frente al reto de la contaminación, haciendo protagonista al peatón y favoreciendo el uso de la bicicleta y el transporte público.
El Plan A cuenta con 30 medidas para conseguir una ciudad sostenible. Entre ellas Madrid Central, una gran área de 472 hectáreas de la ciudad en la que el tráfico estará restringido para que el distrito Centro pueda convertirse en un pulmón en pleno corazón de la ciudad. La nueva ordenanza englobará diferentes medidas para reducir las emisiones de dióxido de nitrógeno actuales y disminuir el ruido.
Aquí puedes consultar más información sobre la Ordenanza de Movilidad Sostenible.