La Junta Municipal de Villaverde liderará la puesta en marcha de un grupo de trabajo para atender y ayudar a personas drogodependientes en el que hará partícipe a distintas entidades y administraciones para poner en marcha un paquete de medidas con las que atajar la existencia de narcopisos en el distrito y, al mismo tiempo, reducir la presencia de toxicómanos en las calles, rescatándoles de sus adicciones y atendiendo sus necesidades sociales. Así lo anunció la concejala de Villaverde, Concha Chapa, durante la última sesión plenaria del distrito, al informar de las últimas actuaciones sobre desmantelamientos de narcopoblados llevados a cabo en el polígono industrial.
Chapa aseguró que esta iniciativa, que se impulsará desde el Departamento de Servicios Sociales de la junta municipal, se sumará a la puesta en funcionamiento, el pasado 1 de septiembre, de un programa de intervención en calle “con el que vamos a abordar de forma proactiva las necesidades de las personas toxicómanas que acuden a comprar a estos narcopisos, así como las preocupaciones y el malestar de los vecinos y comerciantes de las zonas que lo sufren para mejorar la convivencia y la seguridad vecinal”.
Esta iniciativa, financiada por Plan de Desarrollo del Sur y del Este de Madrid (SURES) del Área Delegada de Coordinación Territorial, Transparencia y Participación Ciudadana, supone la creación de un “grupo de trabajo y acción asistencial que ayude a estas personas a salir del mundo de la droga”, aseguró Chapa, quien explicó que el plan se extenderá hasta 2024 con una inversión de 800.000 euros.
En la actualidad, la Junta Municipal de Villaverde, a través del Departamento de Servicios Sociales, realiza una intervención preventiva con personas en riesgo o en situación de drogodependencia, a las que ofrece información, orientación, asesoramiento y apoyo social, además de atención a situaciones de desprotección social y gestión de servicios y prestaciones sociales.
Sin embargo, desde el pasado 1 de septiembre, se ha reforzado esta intervención con el inicio del nuevo servicio de atención en proximidad a personas en situación de riesgo o con adicciones, un programa de mediación social que sigue dos líneas de trabajo. Por un lado, el Programa de Prevención de Adicciones en entornos comunitarios para adolescentes y jóvenes, destinado a menores de 25 años. Y por el otro, el Programa de Atención en Proximidad para personas con adicciones que no quieren o no pueden dejar de consumir drogas, que busca reducir los daños asociados al consumo y realizar intervenciones para lograrlo. Para ello, ofrece alternativas ocupacionales y/o de ocio saludable, que alejen a los toxicómanos de los ambientes y circuitos de consumo de sustancias, permitiendo su mejor integración en el barrio, lo que también supondrá mejorar la convivencia en el entorno vecinal.
Recuperar a las personas
En palabras de la concejala, con este programa y con el grupo de acción en colaboración con distintas entidades y administraciones que la junta municipal quiere poner en marcha “vamos a abordar de forma proactiva y desde un punto de vista social esta problemática”, confirmando la apuesta y el esfuerzo de este equipo de Gobierno por atajar de raíz el problema.
Así, explicó que el objetivo es que, “tras las exitosas actuaciones que estamos llevando a cabo durante el último año y medio” en lo que respecta al desmantelamiento de narcopoblados desde el punto de vista urbanístico, “ahora centremos todos nuestros esfuerzos en conseguir sacar a estas personas que venían aquí a consumir de la pesadilla que supone entrar en el mundo de las drogas”.