Hace apenas nueve meses, el patinador madrileño Javier Fernández entraba en la Galería de Cristal del palacio de Cibeles para recibir de manos de la alcaldesa la Medalla de Madrid, la máxima distinción de la ciudad. Hoy, martes 20 de febrero, lo ha hecho para ofrecer a los madrileños, a través de su alcaldesa, Manuela Carmena, otra medalla: el bronce ganado en los Juegos Olímpicos de Pyeongchang (Corea del Sur), el cuarto título español en la historia de las olimpiadas de invierno.
“Es un honor recibir a nuestro querido amigo y vecino que ya es medalla olímpica”, ha dicho la alcaldesa, mientras sostenía el trofeo. “Quería traer la medalla a Madrid y al Ayuntamiento porque nos cuidáis mucho”, ha contestado el patinador quien, en el encuentro, ha recibido de manos de Carmena, otro galardón, la medalla de chocolate, un gesto en agradecimiento por la gesta de Fernández y por llevar el nombre de Madrid a todo el mundo.