Ciudades con nombres de calles que rememoren hechos históricos o héroes pacíficos; estatuas y monumentos que muestren familias y no guerreros a caballo en una batalla; medios de comunicación que investiguen sobre las causas de la falta de paz en la sociedad y no sólo sobre los hechos de violencia. Así ha descrito el sociólogo y matemático noruego, Johan Galtung, el escenario de lo que debiera ser una ciudad gobernada para la paz. Lo ha hecho en la sesión plenaria relacionada con este tema dentro del I Foro Mundial sobre Violencias Urbanas y Educación para la Convivencia y la Paz. En palabras del investigador noruego, crear núcleos urbanos pacíficos es una cuestión de voluntad. “La construcción de ciudades de paz no es un problema de recursos. Es un problema de voluntad”.
En esta sesión se han compartido experiencias reales de gobernanza para la paz de países como Brasil, Camerún, Argentina o Ciudad del Cabo. Proyectos con una base común que, en palabras de los diferentes ponentes, pasan por dar acceso a los recursos a todos los habitantes; aplicar nuevas formas de planificación del crecimiento de las ciudades; visibilizar a los más desfavorecidos y escuchar a la sociedad civil. En esa línea se enmarcan proyectos, como el anunciado por la alcaldesa de Roma, Virginia Raggi: la primera edición de un maratón interreligioso en Roma que atravesará los lugares más destacados de culto de la ciudad el próximo mes de septiembre y que se ha programado en colaboración con El Vaticano.
El I Foro Mundial sobre Violencias Urbanas y Educación para la Convivencia y la Paz reúne a más de 2.500 personas, procedentes de cerca de 70 países, hasta mañana viernes./