La vicealcaldesa de Madrid, Begoña Villacís, ha inaugurado hoy, Día Internacional de los Bosques, la parcela de avenida del Talgo, en el distrito de Moncloa-Aravaca, que forma parte del Bosque Metropolitano, la mayor infraestructura verde que se está construyendo en Europa. En un acto celebrado sobre el terreno, Villacís ha anunciado que, desde hoy, los vecinos pueden disfrutar de este nuevo ámbito verde de 6,3 hectáreas. Pero no es la única, ya que la zona de Campo de las Naciones, donde se encuentra el Bosque de los Abrazos Perdidos en memoria de las víctimas de la COVID-19, también se abre al público. En total, los ciudadanos cuentan ya con 16,1 hectáreas nuevas de bosque, en las que crecerán más de 6.600 árboles y más de 39.600 ejemplares arbustivos.
En palabras de la vicealcaldesa «este no es un proyecto electoral, sino un proyecto de ciudad. Plantamos para que lo disfruten las próximas generaciones. Por eso es importante la presencia hoy aquí de todos los grupos políticos, que garantizan la continuidad de este bosque incluido en los Acuerdos de la Villa». Según ha recalcado Villacís, “Madrid crece y crecerá, pero lo hará con la naturaleza integrada y no a costa de la misma».
Por su parte, el delegado de Desarrollo Urbano, Mariano Fuentes, que también ha visitado esta parcela, ha anunciado que en ese emplazamiento se hará una pista de atletismo integrada en la naturaleza, a imagen y semejanza de una de las pistas más bonitas que existen en el mundo y que se encuentra en Olot, Gerona. También hay ejemplos fuera de España, como la pista Michael Johnson Track de Portland (Oregón, EE. UU).
En este enclave de Villaverde se está desarrollando la fase III de las obras del Bosque Metropolitano con un presupuesto de 4,2 millones de euros, que incluye esta innovadora pista de atletismo, homologada por la federación y que contará con ocho calles en su interior que recorrerán todo el trazado longitudinal de la misma, así como con una zona especial para la práctica de los 100 y 110 metros lisos y con un ancho total de la pista de 9,76 metros.
Además, para facilitar la evacuación de las aguas pluviales sobre la pista, se le dará una pendiente del 1 % hacia el interior, de manera que estas aguas se viertan a una cuneta verde proyectada para este fin. El plazo de ejecución de la obra será de diez meses y el objetivo es inaugurarla el año que viene.
Según Fuentes, se trata de “mejorar la calidad de vida de la ciudad, incluyendo el deporte, el ejercicio y el bienestar físico en la ecuación. Porque eso es también el Bosque Metropolitano”. Esta infraestructura verde es un espacio forestal y también urbano que permite a los madrileños no tener que desplazarse de la ciudad para encontrarse con la naturaleza mientras practican deporte. Es una apuesta también por el reequilibrio territorial, generando un nuevo nodo verde en Villaverde, que se unirá con el parque forestal Julio Alguacil Gómez.
Al acto de inauguración han asistido la concejala del distrito, Loreto Sordo, y los portavoces de los distintos grupos políticos. Además, han estado presentes los equipos de los proyectos ganadores del concurso de ideas para el Bosque Metropolitano y un grupo de alumnos de la UPM interesados en el proyecto que han recibido una explicación del mismo por parte de los técnicos municipales.
Para cerrar el Día Internacional de los Bosques, Begoña Villacís y Mariano Fuentes han participado en el acto de plantación en la parcela de La Muñoza -3,4 hectáreas ubicadas entre el aeropuerto Adolfo Suárez-Barajas y el arroyo de Rejas- de 7.000 unidades arbóreas que la compañía de inmologística Goodman dona al Bosque Metropolitano, ya que esta gran apuesta verde es “un proyecto de todos y necesita de la colaboración público-privada” ha explicado la vicealcaldesa.
El Bosque Metropolitano, una realidad
El Bosque Metropolitano es un anillo forestal de 75 kilómetros que bordeará la ciudad, estableciendo la conexión con espacios verdes existentes y restaurando ecológicamente áreas degradadas mediante la plantación de especies forestales autóctonas. Se trata de un proyecto de ciudad a largo plazo en el que se plantarán más de un millón de árboles y que tendrá el potencial de absorber 170.000 toneladas de CO2.
Las ventajas de este bosque son su capacidad para mejorar la calidad del aire, mitigar el efecto isla de calor, preparar a la ciudad para que esté mejor adaptada al cambio climático, conservar la biodiversidad y ofrecer alternativas de ocio saludable, entre otras. Hasta ahora el Ayuntamiento ha invertido en este cinturón forestal 48 millones de euros. /