El Ayuntamiento de Madrid ha creado una Unidad de Mediación Administrativa, tras la realización de un proyecto piloto que se ha desarrollado en diferentes Áreas de Gobierno y en algunos distritos durante once meses. De esta forma, Madrid se convierte en el primer Ayuntamiento de España que crea una Unidad de Mediación Administrativa con el objetivo de que los procedimientos administrativos puedan finalizar a través de un pacto o acuerdo entre la administración y la ciudadanía.
Con este nuevo servicio, en los encuentros de mediación que se realicen en el Ayuntamiento de Madrid participará una empleada o un empleado público, que actuará en nombre de la administración local. Durante el desarrollo del proyecto piloto las personas que han participado han manifestado su satisfacción por la intervención de los representantes de la administración destacando que han aportado claridad, información o una salida al problema planteado.
La mediación es un proceso en el que las vecinas y vecinos participan voluntariamente, de manera que es totalmente gratuito y confidencial. Resultado de esta mediación ante un conflicto de la administración y la ciudadana o el ciudadano surge un pacto respetuoso con la legalidad y con los intereses de las terceras personas que pudieran resultar afectadas al alcanzar el mismo.
Un 67% de acuerdo alcanzado
Durante los once meses que este servicio ha estado en fase experimental, se ha alcanzado un 67% de acuerdo en los expedientes en los que todas las partes han participado en el proceso de mediación. El 82% de las mediaciones se han realizado en el Área Medio Ambiente y Movilidad, en lo relativo a la adopción de medidas para hacer cumplir las normativas municipales en materia de instalación o elevación de chimeneas, cese de ruidos de la maquinaria de los ascensores así como autorizaciones para acceder a viviendas para realizar mediciones.
Eficacia en la gestión: reducción de costes y fomento del diálogo
Con la mediación administrativa se realiza una gestión de la administración local más eficaz ya que se reducen los litigios y el número de procedimientos judiciales inciados, tanto por la ciudadanía como por el Ayuntamiento. Además, se reducen los costes económicos, y en algunos casos emocionales, que ello conlleva.
Este servicio también genera sinergias entre los empleados públicos y las vecinas y vecinos fomentando una nueva gestión de los problemas ciudadanos basada en el diálogo, la escucha y la empatía. En este sentido, destaca que la administración, a través de los funcionarios y funcionarias municipales, ofrecen garantías jurídicas y soluciones eficaces y útiles a través de la argumentación del propio ciudadano y la aportación de ideas por ambas partes para lograr un acuerdo común y respetuoso.
Con este servicio, el Ayuntamiento de Madrid pretende que la relación de las vecinas y vecinos con la administración local sea más humana y pacífica. /