La iniciativa, que se extenderá hasta el 25 de noviembre, contempla 25 charlas educativas en seis colegios públicos del distrito. Además, una informadora ambiental recorrerá las inmediaciones de la zona canina del parque de Berlín y de las fuentes mixtas, así como las colonias históricas Cruz del Rayo, Viso y Unión Eléctrica para informar y sensibilizar a las personas que paseen perros. La junta del distrito repartirá 500 botellas entre el alumnado que tiene perros en casa y a las personas que paseen sus mascotas en la vía pública. Son reutilizables y plegables y disponen de mosquetón para facilitar su transporte.
Yolanda Estrada en el área canina del parque de Berlín
La campaña da respuesta a la preocupación expresada por los menores en los plenos infantiles celebrados en el distrito, ante la presencia de orines y restos de excrementos en vías y espacios públicos. Según el censo de animales domésticos por distrito a fecha de 2023, en Chamartín hay 13.632 perros y 5.181 gatos.
“En las propuestas de los plenos infantiles, los menores nos solicitaron la necesidad de concienciar y formar a las personas que tengan perros para garantizar el bienestar de la vecindad, su ordenada convivencia y la adecuada conservación del mobiliario urbano”, ha explicado Estrada, “hemos escuchado a los niños y jóvenes del distrito y, por eso, lanzamos esta campaña”.
Los niños, prescriptores en sus casas
Los programas de educación ambiental dirigidos a población infantil y juvenil impactan en el entorno social inmediato, amistades, familias y hogares. En materia de medioambiente, ha subrayado la concejala, “los niños y jóvenes son influencers en sus casas y contexto cercano y con esta campaña que se desarrolla en los colegios, alcanzamos directamente al público objetivo, los dueños de los perros”.
En total se han planificado siete charlas de alrededor de una hora, dirigidas al alumnado de 5º de Educación Primaria de los centros del distrito Pintor Rosales, Patriarca Obispo Eijo Garay, Luis Bello, Isaac Albéniz, San Juan de la Cruz y Arquitecto Gaudí.
A través de un enfoque didáctico y ameno, personal cualificado con experiencia en residuos y en educación ambiental buscará sensibilizar sobre la importancia de la corresponsabilidad individual y familiar para minimizar los efectos de las prácticas inapropiadas en el espacio público. Desmitificarán falsos mitos como que el azufre en polvo evita que los animales orinen en fachadas, que sea bueno para fertilizar plantas o que el olor desaparece con el tiempo. Respecto a las heces, se insiste en que contienen parásitos, representan un riesgo de caída y son fuente de alimento para insectos, provocando plagas. También recordarán la normativa de tenencia de animales y la obligación de recoger los excrementos caninos. /