La alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, ha asistido hoy martes a la reunión convocada  por Abel Caballero, presidente de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), para abordar la reinversión del superávit municipal y el cambio de la regla de gasto. Carmena se ha mostrado esperanzada, aunque algo escéptica,  ante el compromiso del Ministerio de Hacienda de llevar al Congreso de los Diputados en dos o tres semanas un real decreto para permitir la reinversión del superávit de los Ayuntamientos. “Creo que estamos dando unos pasos muy importantes para conseguir que los Ayuntamientos tengan esa autonomía que permita que sus ahorros vayan donde tienen que ir: a lo que piden los ciudadanos.” En el caso de Madrid, son 1.100 millones de remanente que podrían destinarse a cubrir las necesidades sociales y a fomentar el desarrollo de la ciudad. No hacerlo implicaría un frenazo para esa dinamización.  “Dejar el dinero en las arcas es la política más deleznable de manos muertas”, ha subrayado la alcaldesa, quien ha advertido de la necesidad de “tomarse en serio” los acuerdos. “Quiero recordar el pacto de Estado sobre violencia de género. Todo ese dinero que íbamos a recibir dónde está”, se ha preguntado. “Los compromisos se cumplen y de eficacia y eficiencia sabemos los alcaldes”.

Al encuentro estaban convocados los alcaldes y alcaldesas de las capitales de provincia y de ciudades de más de 50.000 habitantes. Carmena ha acudido acompañada por Jorge García Castaño, delegado de Economía y Hacienda; Rita Maestre, portavoz del Gobierno municipal, y  Purificación Causapié, portavoz del grupo municipal socialista.

García Castaño ha calificado de “grandísima noticia” el compromiso del Ministerio de Hacienda, al considerar que supone “un salto cualitativo para los municipios de este país”. Poder invertir el superávit es, para García Castaño, un asunto “especialmente sensible” para Madrid, “ya que si hay 5.000 millones de superávit en los municipios de España, más de una quinta parte corresponde al Ayuntamiento de Madrid y a los ciudadanos de la capital, que lo han pagado con sus impuestos”. “En Madrid somos un Ayuntamiento que tenemos una gran capacidad de recaudación pero un techo de gasto muy bajo, que provoca un superávit artificial de 1.000 millones de euros”.  Otro paso importante es la solicitud de todos los regidores de ampliar el tipo de inversiones, “incluyendo  nuevos equipamientos en educación, servicios sociales, esenciales todos para la ciudad y que hasta ahora estaban excluidos”, ha concluido el responsable de la Hacienda municipal.

Por su parte, la portavoz socialista, Purificación Causapié, ha considerado “enormemente positivo” que haya la posibilidad de mejorar las finanzas de los Ayuntamientos “sobre todo después de la situación por la que ha pasado y está pasando el Ayuntamiento de Madrid en aplicación de la regla de gasto y en las posibilidades de reinvertir el superávit”./

 

Manuela Carmena habla sobre la autonomía que necesitan los ayuntamientos para que los ahorros puedan ser invertidos en las necesidades de los vecinos y vecinas