El Área de Cultura y Deportes del Ayuntamiento de Madrid, va a convocar un concurso de ideas con jurado, en colaboración con el Colegio Oficial de Arquitectos de Madrid (COAM), para obtener la solución técnica más adecuada frente a los posibles usos del antiguo frontón Beti Jai, situado en pleno barrio de Chamberí. Para ello se han contemplado usos congruentes con la recuperación del juego de pelota, otros usos deportivos, culturales, conciertos o exposiciones.
Este concurso de ideas ha sido presentado hoy en la sede del COAM por la coordinadora general del Área de Cultura y Deportes del Ayuntamiento, Carmen Rojas; el decano de Colegio de Arquitectos de Madrid, José María Ezquiaga, y el director de la Oficina de Concursos de esta entidad, José Luis Barrero.
Esta convocatoria busca obtener la mejor propuesta para solucionar los cuatro problemas comunes que tendrían la implantación de cualquiera de estos usos: la accesibilidad universal del edificio, la evacuación de aforos, la colocación de instalaciones de climatización y una hipotética necesidad de cubrición de la cancha.
Tras la resolución de este concurso de ideas, prevista para otoño de este año, el Ayuntamiento elegirá el uso que tendrá finalmente este histórico edificio, teniendo en cuenta que garantice su sostenibilidad económica, la prestación de un servicio público para la ciudad, que sea respetuoso con el inmueble y de gestión eficaz.
En ese momento se convocará un concurso de servicios, que será abierto y adoptará la solución técnica elegida en el concurso de ideas para implantar el uso propuesto.
El objetivo de todo este proceso es compartir con la sociedad las soluciones respecto al Beti Jai, unas soluciones comprometidas con la conservación de un bien patrimonial de gran interés de la ciudad de Madrid y también con las medidas de carácter técnico que garanticen el uso de este edificio como un servicio público.
Bien de Interés Cultural
El antiguo frontón Beti Jai se construyó para albergar los encuentros de esta especialidad deportiva de juego de pelota, que llegó a tener gran popularidad en Madrid, donde hubo más de una decena de frontones de parecidas características en la ciudad a principios del siglo XX y finales del XIX.
Proyectado por el arquitecto Joaquín Rucoba en el año 1893 en el distrito de Chamberí, fue inaugurado el 29 de abril de 1894 y tenía capacidad para 4.000 personas en pie. Dejó de funcionar en el año 1919 y desde entonces ha tenido una serie de usos que van desde viviendas a un taller de reparación de coches, estando en desuso desde hace más de treinta años. Muy deteriorado, fue declarado Bien de Interés Cultural con la categoría de Monumento en el año 2011 y es el único frontón que queda en pie en Madrid.
Obras de consolidación
El edificio fue expropiado por el Ayuntamiento en 2015 y desde 2016, la Dirección General de Patrimonio del Área de Economía y Hacienda está llevando a cabo obras de consolidación de las estructuras, cubiertas y muro medianero del edificio existente. Asimismo, va a restaurar las escaleras existentes del edificio mediante una Inversión Financieramente Sostenible./