El delegado de Familias, Igualdad y Bienestar Social, Pepe Aniorte, ha presentado hoy el programa No second night para mujeres sin hogar, que incorpora 53 plazas y una metodología basada en la detección y la atención temprana con el objetivo de que las usuarias puedan recuperar su autonomía y disponer de nuevas oportunidades en el menor tiempo posible.

No second Night se basa la atención temprana, la intervención intensiva y el trabajo multidisciplinar como clave para la recuperación de las personas sin hogar”, ha explicado el delegado. El programa ha venido precedido de un proyecto piloto llevado a cabo entre los meses de junio y octubre de 2020 en colaboración con la entidad Luz Casanova, por el que pasaron 50 mujeres. De ellas, el 40 % consiguió recuperar la autonomía, lo que supone un “éxito en tan breve plazo de tiempo”, según ha destacado la directora general de Inclusión Social, Laura Castaños.

En febrero de 2021, la Junta de Gobierno aprobó el contrato de gestión del nuevo programa, en marcha desde mediados de junio. De esta forma, Madrid se convierte en la primera ciudad de España en incorporar la metodología No second night, importada desde Londres. Según ha explicado Aniorte, este programa “es un ejemplo perfecto de lo que queremos hacer en los servicios sociales: traer innovación para evitar la cronificación de las situaciones de vulnerabilidad y permitir a los usuarios recuperar las riendas de sus vidas lo antes posible”.

No second night se convierte así “en una pieza clave de la política municipal para mujeres sin hogar”, ha señalado el delegado del área social. De esta política también forma parte el centro que se abrirá antes de final de año en el distrito de Hortaleza para atender tanto el sinhogarismo como la violencia de género que sufren estas mujeres y que será pionero en España. Además, estas políticas se enmarcan también en las 21 medidas prioritarias para combatir la violencia contra las mujeres aprobadas sin votos en contra por el Pleno municipal en noviembre de 2019.

El nombre del programa (Sin segunda noche, en inglés) hace alusión a la importancia de evitar el deterioro que sufren las personas sin hogar, en este caso las mujeres, en los primeros días y semanas en la calle. Este deterioro físico, anímico y mental complica después el proceso de intervención y la recuperación de las personas. En la práctica, muchas de las mujeres que recurren al programa lo hacen antes de llegar a situación de calle.

Durante el acto de presentación se ha proyectado un vídeo en el que una mujer de nacionalidad venezolana ha relatado su paso por el proyecto piloto y cómo la atención recibida evitó que terminara durmiendo en la calle. /

Pepe Aniorte, delegado de Familias, Igualdad y Bienestar Social: