Madrid rebaja sus impuestos, tasas y precios públicos para 2023. Una vez más, en lo que llevamos de mandato de Gobierno, el Ayuntamiento de Madrid oxigena los bolsillos de los madrileños. Y, esta vez, el ahorro es de 121 millones de euros. Sumados a las bajadas de impuestos de ejercicios anteriores, al cierre del próximo año los madrileños se habrán ahorrado 730 millones de euros en esta legislatura.

El proyecto de ordenanzas fiscales para 2023 diseñado por el Área de Hacienda y Personal del Ayuntamiento de Madrid incluye también incentivos para seguir avanzando en la reactivación económica y el fomento del empleo. Y el apoyo a las medidas de sostenibilidad ambiental sigue siendo una de las líneas maestras de la política fiscal del Gobierno municipal.

Otra vez baja el IBI y el de Madrid es el más bajo de España

La apuesta por compaginar el mantenimiento de unos servicios públicos de calidad con impuestos y tasas equilibrados tiene un fiel reflejo en el IBI que, en 2023, volverá a bajar. Es la tercera vez que lo hace en este mandato. Pasará del 0,456 % al 0,40 %. Es decir, el mínimo establecido por la ley.

La rebaja de este impuesto supondrá beneficios en más de dos millones de recibos que, en su inmensa mayoría, serán de familias, clases medias, autónomos, y pequeños y medianos empresarios.

En 2023 la ciudad de Madrid será, de esta forma, la capital de provincia con el tipo general de IBI más bajo de España, junto a Santander y Zaragoza. En Madrid, la ciudadanía pagará mucho menos IBI que en otras capitales como Barcelona, Sevilla o Valencia.

Y para ejemplo, un botón: por un inmueble de 121.000 euros de valor catastral, en 2023 se pagarán 133 euros menos de IBI gracias a esta nueva bajada.

Las nuevas empresas no pagan el IAE

Una ordenanza que promueve la creación de empleo viene acompañada de beneficios fiscales que remen en la dirección adecuada. A favor de viento y marea, las empresas que comiencen su navegación estarán exentas de abonar el Impuesto de Actividades Económicas durante los dos primeros años de travesía. Los tres años siguientes, además, podrán beneficiarse en un 50 % de la cuota municipal de este impuesto.

Energías renovables, bonificaciones sostenibles

Dirigidas a promover la implantación de energías renovables en los edificios residenciales e instalaciones industriales, las bonificaciones medioambientales mantienen un 50 % del IBI para los inmuebles que instalen paneles solares y el mismo porcentaje en el IAE para la instalación de sistemas de aprovechamiento de la energía solar y geotérmica. Las subvenciones en este apartado se han incrementado un 320 % respecto a 2021.

En relación con el transporte, se mantiene una bonificación de entre el 10 % y el 50 % en la cuota del IAE para las empresas de la ciudad de Madrid que implanten planes que afecten a dos de cada diez de sus empleados (adquisición de abonos anuales de transporte público, por ejemplo). El objetivo es mejorar la eficiencia energética y contribuir al cambio de pautas en los desplazamientos de los trabajadores de la ciudad de Madrid.

Adaptación a nuevas realidades

Con el paso del tiempo, hay tasas que pierden su razón de ser y otras de necesaria creación y regulación. Es por eso por lo que el actual proyecto fiscal deroga dos ordenanzas y modifica seis.

Una de las nuevas ordenanzas incluida en el proyecto es la que regularía el Impuesto sobre Construcciones, Instalaciones y Obras (ICIO). La propuesta incluye también una reforma de las bonificaciones que afectan a las viviendas de protección pública; otra modificación integral de la ordenanza fiscal de la Tasa por Prestación de Servicios Urbanísticos, y la supresión de una ordenanza que regula la tasa por utilización privativa y aprovechamientos especiales constituidos en el suelo, subsuelo o vuelo de la vía pública. Como consecuencia de ello, se eliminan 18 tarifas.

Se trata, en definitiva, de cambiar lo que está desfasado y de sistematizar y racionalizar nuevas realidades. Por ejemplo, lo que tienen que pagar los food trucks por ocupar la vía pública. Los tiempos cambian y las administraciones públicas han de adaptarse a ellos necesariamente.