Territorios de mujer. Espacios donde formarse, tomar conciencia de sí mismas y empoderarse, compartir problemas que sacuden sobre todo al ámbito femenino, y también reírse, disfrutar de la charla con otras, intercambiar experiencias. Eso y más son los espacios de igualdad del Ayuntamiento de Madrid, dependientes del Área de Familias, Igualdad y Bienestar Social.

Coincidiendo con marzo, un mes de clara connotación femenina por la celebración el 8 del Día Internacional de la Mujer, te invitamos desde aquí a conocerlos. Has de saber que no importa el distrito en el que residas para acudir a cualquiera de ellos o participar en alguna de sus actividades porque no te van a preguntar dónde vives. El acceso es directo, no es necesario que te deriven desde ningún otro servicio.  Solo tienes que pedir cita en el que más te convenga de forma presencial, telefónica o vía correo electrónico. Y todas las actividades son gratuitas. Aquí tienes la lista.

Se abrieron en 2005 como centros de atención integral a las mujeres. Con el tiempo y la aceptación han ido creciendo en número. Si en 2016 ya había ocho espacios, ahora a inicios de 2022 hay 17 a los que ya mismo se sumará uno nuevo en Latina, que lleva el nombre de María de Maeztu.

Algunos toman sus nombres de mujeres que han hecho historia, pioneras en sus distintos campos o simplemente luchadoras por la igualdad de derechos. Pero no podían faltar las víctimas como Ana Orantes, la granadina asesinada por su marido en 1997 que da nombre al espacio de Barajas; Berta Cáceres, líder indígena hondureña asesinada por un sicario en 2016, que nombra el espacio de Usera o las Hermanas Mirabal, las tres dominicanas, asesinadas por el régimen trujillista en 1960, cuyo nombre lleva el espacio de Tetuán.

¿Qué puedo encontrar allí?

Los espacios de igualdad son recursos públicos municipales especializados en la promoción de la igualdad y la prevención de la violencia machista, y por eso trabajan en tres áreas: atención individualizada, actividades grupales y actividades comunitarias. Cuentan con una plantilla interdisciplinar formada por psicólogos, abogados, dinamizadores sociales, orientadores laborales, además de un equipo administrativo, todos con especialización en igualdad y violencia de género.

Allí encontrarás atención individualiza en aspectos determinantes para tu vida. Desde psicológica, para favorecer tu autonomía personal, reducir el estrés y la ansiedad y prevenir la violencia hasta jurídica para que puedas recibir asesoramiento legal en materia civil, laboral, familiar, extranjería y, por supuesto, violencia machista, pasando por la atención en lo profesional, proporcionándote herramientas que te permitan mejorar tu capacidades y habilidades sociolaborales y así favorecer la empleabilidad de las mujeres.

Para complementar esa atención individual están las actividades grupales, dirigidas no solo a mujeres sino también muchas de ellas a la población general.  Son muchas las propuestas y varían según los centros, por eso te damos solo algunos ejemplos. ¿Qué te parece un taller de emociones, de habilidades sociales para el empleo o de capacitación digital para ‘saltar’ la brecha de género?  O ¿por qué no hacer actividades que contribuyan a aumentar el bienestar personal, como relajación, mindfulness o meditación?  Si quieres explorar la vena más artística no faltan talleres de arteterapia, de radio, clubes de lectura, expresión teatral.

Se trata de abarcar el mundo de la mujer desde todos los ángulos, en todas sus facetas y aventar la semilla de la igualdad por todo el tejido social. De hecho, dentro de las actividades grupales y comunitarias, desde los espacios de igualdad se da formación también a profesionales y a la ciudadanía en general sobre igualdad, prevención y detección de la violencia, al igual que se realizan talleres sobre estos mismos aspectos en los centros educativos. Y, por supuesto, actividades dirigidas a hombres para debatir y reflexionar sobre conciliación y corresponsabilidad en las tareas del hogar.

La reflexión, el debate a veces se realiza a través de paseos comunitarios donde, además de potenciar las relaciones, se pueden descubrir lugares de la ciudad donde la huella de la mujer es honda.

Además, hay una labor continuada de trabajo en red con el tejido social madrileño, tanto público como privado: desde centros educativos, deportivos, culturales, juveniles o de mayores, hasta ONG o asociaciones vecinales.

Por ello, a lo largo de estos casi 17 años de existencia, estos espacios se han convertido en una de las referencias más sólidas en la lucha por la igualdad de esta ciudad.  Y un sitio donde seguir haciendo realidad el lema de la campaña municipal de este año, ‘Para las que son. Para las que fueron. Para las que serán. El 8M lo celebramos’