Bajo el lema ‘Retos y oportunidades de una ciudad para todas las personas’, el Centro Cultural Eduardo Úrculo ha congregado durante los días 18 y 19 de octubre a más de 400 participantes de nueve nacionalidades, tanto en modalidad presencial como telemática, provenientes de diversos ámbitos de la sociedad. El objetivo era intercambiar conocimientos, experiencias y reflexiones sobre cómo hacer de Madrid una ciudad más accesible, más inclusiva y, por tanto, más igualitaria dentro del marco de las II Jornadas de Accesibilidad. Y todo ello desde una perspectiva transversal que apela a la implicación de todos los actores sociales.
Madrid, una ciudad más accesible con el trabajo de todos
Tal y como quedó patente durante esta nueva edición de las jornadas, que nuestra ciudad sea un lugar más accesible e inclusivo pasa por el trabajo conjunto de toda la sociedad y por una ciudadanía que haga efectivo su rol de agente de cambio e impulsora de accesibilidad.
También pasa por el compromiso de numerosos agentes, entre ellos, el Consistorio, que, para hacerlo efectivo, trabaja por generar espacios urbanos que puedan ser utilizados de manera igualitaria por todos. Para ello, ha puesto en marcha proyectos como el Plan de Aceras y Accesibilidad, entre cuyas metas está la supresión de barreras arquitectónicas con el objeto de mejorar la accesibilidad, movilidad y seguridad de viandantes y conductores.
En esta misma línea se enmarca el proyecto presentado durante el desarrollo de las jornadas para mejorar y adecuar las plazas de aparcamiento reservadas a personas con movilidad reducida. Se trata de una iniciativa en la que trabajan de forma conjunta la Oficina de Accesibilidad y la Dirección General de Conservación de Vías Públicas, ambas dependientes del Área de Obras Públicas y Equipamientos, y la Dirección General de Sostenibilidad y Control Ambiental del Área de Medio Ambiente y Movilidad.
Durante la primera fase, el proyecto comenzará como un proyecto piloto en las plazas que no tienen horario permanente de uso, ya que, según el Tercer Sector de la Discapacidad, son las que más problemas generan. En este primer momento, la iniciativa incluirá el análisis y diagnóstico de estas plazas y concretará las propuestas de actuación para aquellas que no estén adaptadas a la normativa y presenten problemas de accesibilidad por necesidad de señalización vertical u horizontal o realización de obra civil.
Soluciones transversales para el diseño de una ciudad más justa e igualitaria
En las conclusiones de las jornadas ha quedado reflejado que, para hacer de Madrid una ciudad más accesible e igualitaria, es necesaria la búsqueda y puesta en marcha de acciones transversales desde todos los ámbitos sociales, como el jurídico, en el que, según las conclusiones, es relevante que la accesibilidad no aparezca definida como derecho sino como condición o como el caso de los poderes públicos, con los que se ha llegado a la conclusión de que es necesario que éstos generen políticas garantistas de derechos y para ello no solo deben cumplir y hacer cumplir las normas, sino también impulsar políticas públicas que contribuyan a garantizar la igualdad de oportunidades para todas las personas.
También dentro de estas conclusiones y en lo que atañe a la administración municipal, la oficina de accesibilidad, promotora de las jornadas, se configura como el medio para el impulso, promoción y mejora de la accesibilidad en la gestión municipal. Una gestión a la que también se apela para la puesta en marcha de iniciativas en el espacio público. Y es que, teniendo en cuenta que la accesibilidad es una condición que debe primar sobre otros temas dentro del diseño del espacio público, se considera que trabajar por un espacio urbano accesible es democratizar la ciudad y la sociedad.
Como parte de ese impulso que debe llegar desde la gestión municipal, según las conclusiones del encuentro, se enmarcan, además, otras dos realidades relacionadas con la dependencia y que necesitan de soporte desde el ámbito de los servicios sociales: la soledad no deseada y la asistencia personal. Soledad no deseada que, en muchas ocasiones, está provocada por la falta de accesibilidad, y asistencia personal que se constituye como un apoyo humano que garantiza la igualdad de oportunidades y favorece la estabilidad.
Junto con los anteriores, el turismo sería otro de los ejes dentro de la administración municipal a los que se exige un compromiso de gestión. Así, para que el turismo de calidad sea una realidad, se considera que es necesaria la incorporación de la accesibilidad en toda la cadena. Además, para que todas las personas puedan disfrutar del patrimonio de nuestra ciudad, se apela a la búsqueda de soluciones que garanticen su uso y disfrute por todos en condiciones de igualdad.
Parece claro, por tanto, que es necesario seguir invirtiendo esfuerzos en numerosos frentes para hacer realidad un Madrid más accesible, inclusivo, igualitario y justo. Y, tal y como reza una de las conclusiones, “invertir en accesibilidad es invertir en calidad de vida y no supone un gasto, sino una inversión”.