Nunca se fueron, ni incluso con el rigor de la pandemia, aunque eso sí el pasado año tuvieron que reducir su despliegue cultural a un mes y sus escenarios al Conde Duque. Este año los Veranos de la Villa vuelven con toda su fuerza. Casi dos meses de programación -del 6 de julio al 29 de agosto-, nuevos escenarios en los que seguir disfrutando de la #CulturaSegura, muchos de los cuales son auténticas joyas del patrimonio monumental madrileño, y un país invitado, Corea. Apetece, ¿verdad?
Todos los géneros, desde la danza, el cine, el teatro, el circo hasta las exposiciones. Todas las procedencias, desde producciones nacionales con especial acento en la cantera madrileña, hasta internacionales, con el énfasis puesto en Corea, el país invitado de esta 37ª edición. Más escenarios hasta sumar 16. Y, de nuevo, la gastronomía con ‘Comerse el verano’, la propuesta iniciada el año pasado por la que cocineros y reposteros de la capital –desde estrellas Michelín a nuevos creadores– prepararán una receta por cada una de las actividades del programa. Todo eso es lo que Lara Lars ha querido plasmar en el diseño de las creatividades, de las que es autora.
Y, por supuesto, veranos inclusivos con prácticamente todas las propuestas accesibles para personas en silla de ruedas y también los propios contenidos con audio-descripción y paseos escénicos previos, intérpretes de lengua de signos, mochilas vibratorias, equipos de bucle magnético y sonido amplificado.
Más de 50 propuestas
El arranque lo dará el cantante lisboeta Salvador Sobral, ganador de Eurovisión en 2017, el próximo 6 de julio, con la presentación de su nuevo disco, Bpm, en el Patio Central de Conde Duque. El telón lo echará el 29 de agosto, Pastora Soler. Entre medias, más de 50 propuestas entre las que es difícil elegir.
Quizá por la trascendencia internacional, hablar del estreno mundial de Bounce by Circa, de la compañía australiana Circa Contemporary Circus (del 7 al 18 de julio en el parque Juan Carlos I) en colaboración con el estudio de arquitectura inglés AL_A architects. Bounce transciende al espectáculo circense para que los asistentes no sean meros espectadores sino participantes de una experiencia sensorial dentro de esa singular carpa, una estructura inflable en forma de nube de 15 metros de alto por 30 de diámetro que refleja el entorno a su alrededor y en su interior encierra un mundo de maravillas.
Conde Duque aglutina gran parte de las actuaciones musicales, entre las que no puede faltar un clásico de Madrid y de los Veranos, la zarzuela, con La tabernera del puerto, de Pablo Sorozábal (7 a 11 de julio), a cargo de la Compañía Lírica Amadeo Vives y la Orquesta de la Comunidad de Madrid.
En este escenario, a modo de ejemplo, se sucederán en julio artistas como Julia de Castro, antigua líder de la banda DE LA PURÍSSIMA, (13); María Toledo con Andy y Lucas y el bailaor Manuel Fernández Montoya (18); Pitingo (25) homenajeará a la cantautora y compositora peruana Chabuca Granda. En agosto, Natalia Lacunza (15) y dos jornadas dedicadas a los nuevos grupos: Megane Mercury, Fresquito y Mango y el reggaeton carismático de Bea Pelea, el día 20 y, el 21, Menta y Marta Movidas.
Y en un escenario nuevo este año, el IES San Isidro, el dúo a capella Tarta Relena con su nuevo trabajo Fiat Lux, que revisa referentes femeninos poderosos y trascendentes.
Hay citas únicas, como la voz de Nuria Espert recitando el Romancero Gitano, de Lorca, bajo la dirección de Lluis Pasqual, en el IES San Isidro (26 a 28 de agosto)
Y en el apartado de danza, nombres como Eva Yerbabuena, el coreógrafo africano Gregory Maqoma, con Broken Chord, una propuesta narrativa con danzas tradicionales africanas que llega en colaboración con la Fundación Orquesta y Coro de la Comunidad de Madrid al Conde Duque (22, 23 y 24 de julio); Sara Cano, coreógrafa madrileña que trae Vengo!, Premio Max 2020 a Mejor Coreografía, una relectura actual de nuestras señas de identidad que veremos en Conde Duque el 30 y 31 de julio; y el Slovenian National Theater Opera and Ballet Ljubljana que prsentará un programa doble: el ballet neoclásico coreografiado para el Concierto para piano n.º 5 en mi bemol mayor, op. 73, de Beethoven, y Strauss’ dream, una revisión actualizada del tradicional Concierto de Año Nuevo vienés, con las melodías más conocidas de Johann Strauss y Gustav Mahler. (11 al 13 de agosto).
Verano ‘ilustrado’
El arte se hace hueco con varias actividades con el foco puesto en la ilustración. La primera, Aquí llegan ellas… desde Suecia con cómics nuevos, una recopilación de las obras gráficas de dibujantes suecas como Liv Strömquist y Nina Hemingsson (1 de julio a 29 de agosto en CentroCentro).
Y en la calle, ¿Pintas o dibujas?, un paseo por el arte de la mano de 11 artistas del cómic, organizada por Acción Cultural Española y comisariada por Jorge Díez (1 de julio al 24 de agosto, paseo de Recoletos)
Y, a medio camino entre música e ilustración, María Hesse y Tulsa ofrecerán el 22 de agosto su Concierto ilustrado, un espectáculo multidisciplinar donde la música y la ilustración se dan la mano en directo sobre un escenario.
Propuestas singulares: tatuajes, cabaret…
¿Imaginas una narrativa de la ciudad a través de los tatuajes? Eso es lo que propone el Proyecto MEMENTO los días 20 y 21 de agosto con Tatuar es cicatrizar juntas, una instalación ‘transmedial’ que investiga la construcción de la identidad en el recuerdo colectivo a través del proceso de grabado en la piel. (Sala de Bóvedas de Conde Duque).
En el mismo escenario, pero del 3 al 8 de agosto, Grumildos, una propuesta cercana al cabaré de la artista peruana Ety Fefer y que es un espectáculo de marionetas autómatas para adultos por el que deambulan personajes oníricos y marginales arropados bajo el manto de la oscuridad y activados por la mirada indiscreta del espectador.
Los días 21 y 22 de agosto, una composición audiovisual para cúpulas 360º de música electrónica experimental en el ciclo Música en órbita, proyecto comisariado por About Music con los artistas multimedia Maotik y Pandelis Diamantides, que estrenan en España Drowning, y Dasha Rush & Stanislav Grazov, quienes traen su proyecto audiovisual Antarctic Takt, sonidos ambient y techno para representar una Antártida abstracta.
Y, también para disfrutar en familiar, Producciones Yllana, nos narra en No todo son pulgas. Memorias y desmemorias de un perro famoso, la historia del perro Paco, un can del siglo XIX conocido por su afición a visitar los famosos cafés de tertulia y espectáculos taurinos, (16 al 18 y del 21 al 25 de julio. Sala Margarita Xirgu del Teatro Español).
Corea, país invitado
Siguiendo la tradición, Veranos quiere ser un proyector de la cultura de otros países y este año le toca el turno a Corea. Solo unos ejemplos de lo que nos van a permitir estos dos meses conocer de la cultura coreana: el Concurso de K-POP en España 2021 (24 de julio) con grupos de canto y baile llegados de toda España para competir por su pase a la final mundial; los secretos de gastronomía budista, a finales de agosto, con la primera visita a España de la monja Jeong Kwanq que, sin estrellas Michelín ni presencia en la lista 50 Best, fascina a los mejores chefs del mundo.
The History of Korean Western Theatre, la obra del dramaturgo Jaha Koo a medio camino entre el arte contemporáneo, la performance y el teatro documental sube al escenario del Conde Duque el 12 y 13 de agosto. Y el artista audiovisual Lee Nam llevará a la fachada de la Serrería Belga (12 a 14 de agosto) su reinterpretación digital de obras maestras clásicas, dando un nuevo significado y vitalidad a cada píxel de la imagen proyectada. Y, si vas con niños, cuentos tradicionales coreanos narrados por la compañía 4 Lunas con figuras planas, máscaras y música en vivo (14 y 15 de agosto, Sala de las Bóvedas de Conde Duque).
A lo largo de los próximos días, te seguiremos desgranando la programación, contándote las nuevas sedes o entrevistando a alguno de los protagonistas. Porque, salgas o no salgas, el verano se vive en Madrid.
Lara Lars, autora de la creatividad de estos veranos