Los X Premios Emprendedoras, recientemente entregados, buscan promover, apoyar, impulsar y motivar la capacidad emprendedora de las mujeres. Tres jóvenes emprendedoras, Natalia Rodríguez, (CEO de Saturno Labs), y Uliana Torkunova, (LetMePark), en la categoría de Premio Empresarias y Paola García, creadora de Lookreando en la categoría Universitaria, han visto que, pese a la pandemia, ha surgido una nueva oportunidad de trabajo y de reinvención. Como coinciden en afirmar las tres premiadas la persistencia, el espíritu de superación y la pasión por su trabajo son claves para poder acariciar el éxito.
En la época actual, la mujer está empezando a adquirir un nuevo rol en el mundo de los negocios gracias a una mayor conciencia de la igualdad de oportunidades y a una mejor y mayor formación. Además de iniciar un nuevo camino, el panorama actual está animando a la presentación de sus propios proyectos y la reinvención de las formas de trabajo. La conciliación familiar y la mejora en los recursos humanos son posibles gracias a más libertad creativa y decisión, además de la responsabilidad de su propia empresa.
Natalia Rodríguez, de Saturno Labs, comenzó su andadura con motivo de la estancia de un familiar en un hospital. Este hecho personal propició que realizara “un pequeño gesto para mejorar la calidad de vida de personas que estaban en un momento muy malo”. En ese momento Natalia decidió dedicar su vida a “crear una tecnología que pudiera ayudar a los demás”. Ese es el punto de partida de Saturno Labs, un laboratorio de investigación basado en una tecnología puntera y enfocado a sectores como el sanitario, el de los negocios o el de la investigación para democratizar el uso de esa alta tecnología y aplicarlo a mejorar la vida, por ejemplo, de los mayores, las personas ciegas, ahora están desarrollando un proyecto con la ONCE, o las estrategias urbanas.
LetMePark es la propuesta de Uliana Torkunova para la movilidad. La tecnología y las ciudades inteligentes han convertido esta aplicación en un modo de “comenzar y terminar un viaje en un aparcamiento sin necesidad de preocuparse por buscar un sitio donde dejar el coche de forma segura”. En un sector como el automovilístico “donde solo un 8 % de puestos está ocupado por mujeres”, la incursión de esta emprendedora demuestra que las cosas están cambiando. El LetMePark de Uliana es una aplicación donde se integran los servicios de aparcamiento en nuestro país, ofreciendo más de 320 estacionamientos con acceso automático y otros más que superan las 1.500 opciones de reserva.
Por su parte, la ganadora de la categoría Universitaria, Paola García, ideó Lookreando ante los cambios en el proceso de compra y en la propia industria de la moda que ha traído consigo la aparición del coronavirus. “Eso me llevó a plantear una nueva utilidad y, en ese sentido, Lookreando se configura como un elemento para probar la ropa antes de adquirirla”. ¿Cómo? El usuario tendría que crear un avatar con sus propias medidas en el que poder probarse las prendas de las distintas firmas incluidas en la plataforma. Así, el usuario puede verse, comprobar si una prenda le sienta o no bien antes de comprarla y evita devoluciones o que los productos ‘duerman’ en nuestro armario por falta de acierto a la hora de elegirlos.
Los objetivos a corto plazo de toda joven emprendedora son conseguir financiación, desarrolladores y captar nuevos clientes y colaboraciones interesantes. Pese a los duros momentos de COVID-19, Paola no se ha planteado dejarlo, sino que quiere seguir con el trabajo a pesar del parón de las actividades.
Ventajas e inconvenientes del emprendimiento femenino
Las principales ventajas del emprendimiento femenino pasan por sentir recompensado el esfuerzo, viendo cómo la libertad de horarios y de elección se transforman en libertad creativa y de toma de decisiones. Ser dueñas de su propio tiempo y convertirse en su propia jefa son alicientes fundamentales para iniciar ese emprendimiento empresarial.
La otra cara de la moneda la configuran el riesgo económico y, sobre todo, la incertidumbre. Arriesgar los ahorros y el futuro de otras personas que dependan laboralmente de ellas generan muchas dudas pero también a la larga se transforman, en muchos casos, en acicates para multiplicar el esfuerzo.
La cuestión es ¿emprender o no emprender? Sin duda alguna, con estos tres ejemplos de mujeres emprendedoras las futuras generaciones tienen un espejo en el que verse reflejadas. No hay límite para perseguir un sueño. Con valentía y esfuerzo todo es posible.