Y regresaron los libreros y retornaron los lectores, y la Cuesta de Moyano volvió a convertirse en esa feria donde perderse entre los libros -filosofía, literatura, arte, ensayos, incluso cómic- y descubrir esas pequeñas joyas, ejemplares descatalogados, tesoros de bibliófilos. Como “notarios” fieles de ese retorno, cinco ilustradores: Almudena del Mazo, Alberto Albarrán, Joaquín González Dorao, Patricia Metola y Marta Ponce, arropados por el saxo de Miguel Le Goff y la guitarra y el violín del dúo Melopea. Y, por supuesto, la gente, vecinos del distrito y devotos de toda la ciudad.
Fue el pasado sábado, en una cita a la que también estaban convocados los aficionados al dibujo, la fotografía o el vídeo para dejar entre todos constancia de la vuelta a Moyano.
Hasta mañana jueves, 23 de julio, puedes ver las creaciones de esos cinco ilustradores en la caseta 22, así como una selección de los dibujos realizados en los últimos años por aficionados y otros profesionales con la Cuesta de Moyano siempre como protagonista. También mañana se sortearán entre los visitantes las ilustraciones de los cinco artistas.
Testigos de la vuelta a la ‘Feria del Boquerón’
‘Regreso a Moyano’ es una iniciativa enmarcada dentro del ciclo de espectáculos de música, teatro, magia, coros y circo ‘Calles vivas en Retiro’, organizado por la junta municipal del distrito junto con la Asociación de Amigos de Moyano ‘Soy de La Cuesta’ con el objetivo de acercar la cultura a la ciudadanía.
Actualmente coexisten 30 casetas regentadas por hijos o nietos de los fundadores de esta feria, creada hace un siglo, y donde se podían adquirir libros por apenas 15 céntimos, el precio de un aperitivo de la época, lo que le valió el calificativo de la ‘Feria del Boquerón’, por parte del escritor Ramón Gómez de la Serna.
Esas pequeñas casetas de madera de apenas 15 metros cuadrados, sin luz ni calefacción, dieron paso con los años a las actuales, más amplias, más cómodas pero con diseño similar a las iniciales. Un carril bici y la peatonalización de la zona, la consolidan como un lugar de encuentro, paseo, compra y, en definitiva, una visita obligada en la ciudad.
Para ilustrar el retorno, tras el parón obligado por la pandemia, se ha llamado a cinco profesionales con una dilatada trayectoria. Patricia Metola (con obra expuesta en el Museo ABC, la BNE y el Museo de Arte Itabashi de Japón, por ejemplo); Marta Ponce, que ha trabajado para varias revistas y editoriales infantiles y juveniles y ha realizado exposiciones en Italia, Japón y Budeos…); Almudena del Mazo, metida en la ilustración desde 2013, publicó su primera novela gráfica en 2018; Alberto Albarrán, director de la Escuela de Arte y Superior de Diseño de Segovia; y Joaquín González Dorao, autor de numerosos libros, sobre todo cuadernos de sus viajes por todo el mundo.
Recuerda, mañana las creaciones surgidas de sus lápices se sortearán en la Cuesta.