Está finalizando enero y, como viene siendo habitual en Madrid en estas fechas, el Área de Medio Ambiente y Movilidad realiza una plantación extra para renovar las flores que adornan la plaza de Cibeles y el paseo de Recoletos. Ciclámenes rosas, fucsias y blancos embellecen este eje central de la capital aportando colorido en los días fríos de invierno.
Más de 13.000 plantas de ciclamen (cyclamen) cubrirán los casi 700 m2 de isletas y macizos ubicados en el entorno de la diosa Cibeles. Sus flores permanecerán hasta abril, cuando con el cambio de estación y la llegada del buen tiempo finalice su floración y sean repuestas por la flor de primavera.
El ciclamen es una de las plantas de flor de invierno que mejor se adapta a las condiciones meteorológicas de Madrid en estas fechas. Además, al ser de ciclo largo se empezó a cultivar en mayo y es ahora, a partir de enero, cuando alcanza su máximo esplendor.
La plantación
Una semana antes de la plantación los jardineros preparan el terreno. Tras retirar los restos de las anteriores flores de temporada (violas amarillas) airean la tierra, pasan el motocultor y enriquecen con sustrato vegetal. Unos días más tarde comienzan las tareas de plantación, colocando una media de 18 plantas por metro cuadrado. Posteriormente realizan los riegos de asentamiento y se da por finalizado el cambio de flor.
A partir de este momento pasarán a recibir los cuidados de mantenimiento que garanticen un estado óptimo de conservación. Los ciclámenes no requieren cuidados especiales, por lo que, al igual que el resto de las flores de invierno que adornan nuestra ciudad, se regarán según su necesidad y se eliminarán las flores, hojas secas y malas hierbas.