El mundo en el que vivimos y en el que trabajamos está cambiando a gran velocidad. Y la manera en la que producimos también. La llamada ‘cuarta revolución industrial’ o ‘industria 4.0’ ha centrado esta semana un encuentro, auspiciado por el Área de Economía y Hacienda, en el que expertos de las tres administraciones y empresarios han abordado los desafíos que plantea esa fusión del mundo digital y la robótica con el industrial.
Para el director de Economía y Sector Público, Bernardino Sanz, la innovación es símbolo de desarrollo económico y social. Y desde el Ayuntamiento “queremos hacer valer los potentes factores que ofrece la ciudad de Madrid –su especialización productiva, sus avanzados servicios, su gran mercado y su posicionamiento como segunda área industrial– para aprovechar esa industria 4.0, es decir, para dar servicio a las nuevas formas de producción”. Durante la jornada “La digitalización e internacionalización de la industria: retos y oportunidades”, Sanz apuntaba en este sentido que la capital es un referente mundial en ciberseguridad y big data.
El acto, celebrado en Madrid Internacional Lab, incluyó tres mesas temáticas en las que representantes del Instituto Español de Comercio Exterior (ICEX), el Centro para el Desarrollo Tecnológico Industrial (CDTI) del Ministerio de Economía e Industria, la Comunidad de Madrid, y el propio Ayuntamiento compartieron estrategias en materia de innovación y pusieron sobre la mesa las oportunidades de financiación pública para abordar los retos y cambios que plantea la industria 4.0.
Los participantes coincidieron en que la introducción de las tecnologías digitales implica un profundo cambio en el modelo industrial y en los procesos de producción. Un ejemplo de esto lo encontramos en la Factoría Industrial de Vicálvaro, el primer centro municipal de apoyo a la empresa dirigido específicamente al tejido productivo, en el que ya hay empresas que están desarrollando estrategias de transformación digital en campos como la biomedicina, el sector energético y el medioambiental.