Si has tenido una incidencia mientras circulas por los túneles de Calle 30, podrás ver en las paredes o puertas unos números y letras. No tendrás más que leerlos cuando llames a los servicios de emergencia para que puedan ubicarte y acudir a tu encuentro en unos seis u ocho minutos.
Pongamos un ejemplo: 16NC15. En este caso te encontrarías en el kilómetro 16,150 metros de la calzada interior central de Calle 30. Todos los servicios de emergencia –los bomberos del Ayuntamiento, SAMUR y Policía Municipal– conocen este sistema, gracias a la formación compartida con el personal de seguridad de Madrid Calle 30.
Estos códigos no son exclusivos de las salidas de emergencia de los túneles. También aparecen, por ejemplo, en las cámaras (15NC50TV01), los postes SOS (15NC50PSOS01) o los ventiladores longitudinales (15NC50VL01). Es decir, todo lo que está instalado en los subterráneos de la vía de circunvalación puede ser localizado rápidamente.
Cuando se produce una incidencia en los túneles, el Sistema de Detección Automática de Incidentes –un algoritmo de vídeo vigilancia que analiza las imágenes de las 1.614 cámaras instaladas en Calle 30– se acciona. Esta activación del sistema puede ser de dos formas:
Si detecta una zona en la que no hay desplazamientos alerta al operador. También si el movimiento es contrario al sentido de tráfico o hay movimiento en las aceras. En el primer caso es un posible vehículo contra sentido y en el segundo, un peatón andando. El sistema lanza una alarma al operador y éste, mediante la visualización, comprueba qué está sucediendo. Es decir, lo que el sistema hace es evitar que el operador esté constantemente visualizando las cámaras para buscar incidentes, ya que automáticamente le advierte.
La otra opción es que sea una persona la que llame desde su teléfono móvil a los servicios de emergencia 112, cuyo sistema de comunicaciones está integrado en el Centro de Control de Madrid Calle 30, o bien avise desde uno de los postes SOS colocados en los túneles cada 75 metros.
Cómo es la evacuación
Los túneles de Calle 30 cuentan con salidas de emergencia cada 200 metros y tienen dos métodos de evacuación dependiendo de la profundidad a la que circulan los vehículos:
- El tramo del bypass –que va desde la avenida del Mediterráneo hasta pasado el Nudo Sur y fue realizado con tuneladora– alcanza cotas de profundidad de hasta 60 metros. En esta zona la evacuación se haría de manera lateral a través de las galerías de emergencia que hay en los dos túneles, uno por sentido de circulación. Como están totalmente sectorizados, la seguridad queda garantizada al evacuar hacia el túnel contrario.
- En la zona que circula en paralelo al río Manzanares y en la avenida de Portugal, donde la profundidad no pasa de los 15 o 16 metros, la evacuación es vertical, directamente a la superficie por las escaleras.
En el caso de incidencia en los túneles, los agentes de intervención de Madrid Calle 30 intervienen en primer lugar. Hay cuatro bases en el recorrido: una situada en el mismo Centro de Control de Calle 30 (Méndez Álvaro, 95), otra en el paseo de Extremadura, una tercera frente al Vicente Calderón y la cuarta, en la entrada a la carretera de Valencia.
Y hace algo más de un año Calle 30 se convertía en el primer subterráneo cardioprotegido del mundo gracias a los desfibriladores externos que llevan estos equipos de intervención en primera instancia en caso de incidente.
Calle 30 suma 48 kilómetros de recorrido, ida y vuelta ramales incluidos. Por los túneles circulan una media diaria de medio millón de vehículos, cifra que se incrementa hasta el millón y medio de desplazamientos en toda la infraestructura.