Culturas de la movilidad es un proyecto impulsado por Medialab-Prado y CentroCentro en colaboración con el Área de Gobierno de Medio Ambiente y Movilidad del Ayuntamiento de Madrid y la EMT. Propone abordar la movilidad urbana desde una perspectiva amplia, entendiendo que tiene una relación directa con nuestros modos de vida más allá de la esfera puramente técnica y de planificación eficiente del transporte. Se trata de varios prototipos para adaptar la movilidad urbana a nuestro modo de vida, pensados para comenzar a implantarlos progresivamente desde ahora coincidiendo con la Semana Europea de la Movilidad.
A continuación detallamos cuáles son estos seis prototipos:
Biciescuela Madrid Escucha
Biciescuela pretende incrementar el número de ciudadanos que se desplazan en bici aumentando la seguridad personal. Para ello pone en marcha actividades de formación en habilidades ciclistas, trabaja también en la creación de cultura ciclista y pone en marcha un taller de reparación.Con esta iniciativa, muchos ciudadanos se verían beneficiados por el uso de la bicicleta si consiguieran tener claras las normas, los tipos de carril por los que se puede circular… No es lo mismo saber “montar” en bici que saber “circular” en bici por la ciudad.
Los objetivos que persigue la biciescuela es animar a aquellos que tienen poca seguridad en sí mismos al desplazarse en bicicleta, aumentar el respeto de todos los colectivos hacia los ciclistas y viceversa, incrementar los desplazamientos en bici y a su vez reducir las emisiones químicas y acústicas.
Tómate un descanso Madrid Escucha
Muchas personas se desplazan a pie a la compra, al centro de salud, a por los nietos al colegio, o a pasear, sin encontrar un lugar donde poder descansar. En gran parte de los barrios del distrito Centro existen calles que presentan gran desnivel en el terreno, por lo que los vecinos de la zona (en general gente mayor) agradecerían encontrar a su paso bancos para poder sentarse a recuperar las fuerzas.
Con esta medida se pretende diseñar un tipo de asiento abatible anclado a la pared para ahorrar espacio debido a la estrechez de las calles del casco histórico.
Camino escolar seguro Retiro Experimenta
Camino escolar seguro organiza a personas adultas como voluntarias en puntos concretos para la creación de un recorrido seguro al cole. También a comercios amigos para que las niñas y niños que no van acompañados a la escuela tengan localizados, en los lugares pactados, a una persona adulta conocida. No hay percepción de vigilancia, se fomenta la autonomía y se aseguran figuras a las que recurrir si hay algún problema.
C.O.S.O. Interactivos’17
C.O.S.O. es un dispositivo tecnológico que, por medio de un móvil, captura las vibraciones producidas por las texturas del terreno. Está conectado a una guía de luces LED que cambian de color según las texturas y registra y emite los datos en tiempo real.
El objetivo de este instrumento es convertir una bicicleta en una herramienta cazadora de datos, un artilugio de diagnóstico para el análisis del entorno, capaz de cuantificar el suelo por el que se traslada.
Relatos en la espera Interactivos’17
Los usuarios del transporte público reciben información del tiempo de espera durante su estancia en las marquesinas. Este proyecto aprovecha ese tiempo previsto para involucrar al viajero en un relato de la ciudad que le hace viajar con su imaginación sin moverse de la parada.
El “experimento” ha comenzado en una de las paradas de la línea 6 de EMT, la ubicada en la plaza Tirso de Molina por su afluencia de gente. Los relatos son presentados en formato audio.
Marquesinas accesibles Fuencarral Experimenta
Las paradas de autobús cuentan con una zona para pasajeros en sillas de ruedas, pero es habitual que se despliegue la rampa de acceso en un lugar erróneo. Es muy habitual que el conductor la despliegue al interior de la marquesina, dificultando las maniobras que debe realizar la persona en silla de ruedas para acceder al autobús. Esta dificultad aumenta cuando la marquesina tiene una mampara de cristal en el lado donde está ubicada la zona para personas en silla de ruedas, reduciendo de este modo el espacio para acceder al interior de la marquesina y subir al bus.
El proyecto se basa en pintar una marca amarilla para que los conductores sepan dónde situar el autobús.