La alfombra roja llegó hasta el Manzanares. Orillando el río, la Caja Mágica se vistió de gala para acoger la ceremonia de los Premios Platino, mostrando una vez más la versatilidad con la que fue concebida. Por ella desfilaron actores, directores, guionistas, productores, músicos…, gente que hace cada día posible un arte que representa algo más del 11% de la industria cinematográfica mundial. Pero, sobre todo, que aporta una visión distinta, una forma de vivir, pensar, crear y, en definitiva y como dijo el Platino de Honor, Edward James Olmos, de “atacar las historias” de una forma diferente: el cine iberoamericano, en español y en portugués. Olmos forma ya parte del podio de los Platino de Honor junto con Sonia Braga, Ricardo Darín y Antonio Banderas.

La alcaldesa, Manuela Carmena, entregó al empresario y productor español de la película “Esteban”, Jaume Rouras, el premio de Cine y educación en valores, un gesto que resume bien la apuesta del Ayuntamiento madrileño por el cine y por estos premios, nacidos con la vocación de crear un sello que reflejara la voluntad de potenciar y dinamizar el universo cinematográfico iberoamericano, la aportación creadora de un colectivo de más de 500 millones de personas, tan plural como los países que la integran, pero unida por lazos históricos y culturales que convergen en un idioma común. La alcaldesa manifestó que “es una noche para estar orgullosos porque Madrid es hoy la capital de la cultura y el cine iberoamericanos”. Tras esas palabras, Carmena evocó figuras como la premio nobel Gabriela Mistral, la pintora Frida Kahlo y la escritora Isabel Allende. Y añadió que representan nuestra cultura y nuestros valores.

Junto con la alcaldesa, el actor Imanol Arias. Fueron una de las sorpresas de la noche. Este galardón simboliza, además, un rasgo de la concepción del cine por la comunidad iberoamericana: más allá de la distracción, más allá de la diversión y del glamour, el cine es un instrumento de reivindicación, de educación y transmisión de valores; una herramienta de integración. Por eso, los Platino incluyeron el año pasado esta categoría, con la que suman ya 15 las premiadas.

El Premio Platino a la mejor película fue a parar este año a “El ciudadano ilustre” –Argentina, ficción-; la mejor dirección se la llevó Pedro Almodóvar por “Julieta”; la mejor interpretación femenina recayó en la celebrada actriz Sonia Braga por “Doña Clara” –Brasil- y la masculina en Óscar Martínez por “El ciudadano ilustre”. Como ya se ha dicho, el Platino de Cine y educación en valores fue para la película cubana “Esteban”.

Este año la gala corrió a cargo de Carlos Latre y la actriz y cantante uruguaya Natalia Oreiro. Entre los famosos encargados de entregar los galardones, nombres como Jorge Perugorría, Geraldine Chaplin, Clara Lago, Darío Grandinetti o Imanol Arias. Junto a ellos, músicos de la talla de Miguel Bosé, Los del Río, el argentino Abel Pintos, India Martínez o el rapero alicantino Arkano, haciendo una vez más realidad el binomio indisoluble entre música y celuloide. En el patio de butacas, no faltaron los principales nombres del cine, la televisión, la música como el director Juan Antonio Bayona –premiado con cuatro galardones técnicos-, los actores Pepón Nieto, Amaia Salamanca, Miguel Ángel Silvestre, la cantante Lucrecia, el productor Agustín Almodóvar y el empresario Enrique Cerezo, entre otros muchos.

En estos cuatro años de andadura –Panamá, Marbella y Punta del Este (Uruguay) albergaron las anteriores ediciones- los Platino se han consolidado como el gran evento de promoción internacional, fomento y apoyo al cine iberoamericano. Una industria que crece día a día. Un dato que lo demuestra bien: el año pasado se estrenaron más de 900 largometrajes, frente a los 760 que llegaron a las salas en 2014. Los Platino han batido este año un nuevo record de participación con 847 producciones presentadas a las distintas categorías.

Fiesta de ciudad

Cuando hace un año Madrid cogió en Punta del Este el testigo para organizar la cita, lo hizo con una estrategia clara: “Queremos mostrar nuestra doble vocación, por el cine y por Iberoamérica”. Así lo resumió entonces Luis Cueto, coordinador general de Alcaldía, de quien depende la Subdirección General de Promoción Internacional, encargada de aportar el millón de euros para la celebración de los premios. Cueto añadió un deseo más: “que los Platino mostraran algo más que la cara del glamour de una fiesta de entrega de premios para convertirse en una fiesta de ciudad y un foro de debate y de compromiso con el cine en español” y entregó el testigo a México, próxima sede de los premios que se adelantarán a abril.

Conseguir lo primero, hacer una fiesta de ciudad y para la ciudad, implicaba abrir los espacios municipales. Un mes Platino en Cineteca; una semana Platino en toda la ciudad y una noche Platino en Caja Mágica. Ese es el resultado. Durante la pasada semana, entre Cineteca, Conde Duque, la Galería de Cristal de CentroCentro, espacios a los que se sumó la Academia de Cine española, se han proyectado 47 largos que han participado en las cuatro ediciones de los Platino. El Ayuntamiento arropó además la alfombra roja que se extendió el jueves en la plaza del Callao para dar la bienvenida oficial a los protagonistas.

Integrar el debate y el apoyo a la producción, tuvo su exponente en la celebración, coincidiendo por primera vez con los Platino, del VI Foro EGEDA-FIPCA celebrado este jueves 20, en CentroCentro, donde creadores, productores, distribuidores se reunieron bajo un epígrafe único Cine y Educación y donde se analizaron los últimos datos de la industria. En su sesión de tarde, se entregó el primer premio AMA, convocado por la Asociación Madrileña del Audiovisual, bajo el auspicio del Ayuntamiento y de EGEDA, entidad que organiza los Platino y que aporta los 10.000 euros de dotación del premio AMA, que fue a parar a Bestseller, una producción argentina.

Han sido muchos pasos, todo encaminados para hacer realidad un lema: De Madrid al cine./