Los cementerios forman parte de la vida. Dicho así puede sonar un poco extraño, pero desde el Ayuntamiento pensamos que es importante invertir en un patrimonio y en un servicio público que la ciudadanía necesita. Y que es, con todo el respeto que merece el final del ciclo de la vida, hermoso invertir en estos espacios de intimidad, de duelo, dolor y también de homenaje.
El Cementerio de La Almudena dispone de casi 600 nuevas unidades de enterramiento. La Empresa Municipal de Servicios Funerarios y Cementerios de Madrid acaba de concluir la construcción de 198 sepulturas y 400 columbarios.
Un compromiso de la joven empresa 100% municipal (en septiembre próximo hará un año de su municipalización), que incluyó en su Plan de Inversiones 2017-2019 dotar al mayor camposanto de la ciudad de Madrid de más secciones para dar sepultura a nuestros seres queridos.
Del total de 598 unidades se han construido 198 sepulturas – 28 están situadas en el Cuartel 251 del cementerio y otras 170 en el Cuartel 246– y 400 nuevos columbarios en la Sección 20 (conjunto de nichos). La diferencia entre lo que denominamos sepulturas y los columbarios es que las primeras son cavidades excavadas en la tierra para enterrar a nuestros fallecidos. Los segundos son los espacios para colocar las urnas funerarias. La Almudena ofrece los cuatro servicios posibles de enterramiento: panteones, sepulturas, nichos y columbarios.
La ejecución de los trabajos ha supuesto un coste de 616.919 euros, contemplados en el Plan de Inversiones de la Empresa Municipal de Servicios Funerarios y Cementerios, cuyo presupuesto total para construir unidades de enterramiento asciende a 1.356 millones de euros.
El cementerio de Nuestra Señora la Almudena está situado en el Este de Madrid, en el barrio de Ventas (Ciudad Lineal), en la avenida de Daroca, 90. Con 1.082.781 m2 de extensión, es el mayor de todos los cementerios de la ciudad y uno de los mayores de Europa occidental. Se encuentra delimitado por las avenidas de Daroca y de las Trece Rosas, y la carretera M-23. La accesibilidad está garantizada con servicio de transporte público (dos líneas de autobuses de la EMT y dos paradas de metro próximas a la instalación, La Elipa y La Almudena).
Inició su actividad en 1884. La instalación no sólo responde a las necesidades derivadas del servicio público que presta, sino que constituye también una expresión de la corriente modernista en la arquitectura de la ciudad. El conjunto compuesto por los pórticos de acceso y sus edificios adosados se denomina Los Propileos.
Además de éste, la EMSF gestiona el Cementerio Sur, el de Carabanchel, Fuencarral, Canillas, el Civil (junto a La Almudena), Camino del Pardo, Hebreo, Cementerio Cristo de El Pardo, Aravaca, Vallecas, Barajas, Villaverde y Canillejas.