Policía Municipal de Madrid ya viste sus nuevos uniformes. Esta semana, coincidiendo con las fiestas de San Isidro, los agentes y las agentes han salido a la calle con unas prendas en las que, como ya se vio en su presentación, el pasado 21 de febrero, desaparece el color azul oscuro y el amarillo de las antiguas y en las que destacan los tonos azules y reflectantes.
Cada funcionario ha recibido 21 prendas, entre las que destacan una braga especial anticorte para el cuello, fabricada en tejido térmico, y camisetas interiores, también térmicas. La nueva uniformidad busca la seguridad, la durabilidad y la comodidad, adaptándose a las condiciones físicas de cada agente.
Estas prendas se suman a la dotación de chalecos antibalas, masculinos y femeninos, adaptados a la talla de cada persona, que ya se entregaron con anterioridad. Los chalecos tienen dos fundas interiores y una exterior del mismo color que el uniforme actual, con un nivel de protección balístico de alto nivel y con protección anticuchillo y antipunzón similar al de otros cuerpos de seguridad.
El objetivo del Ayuntamiento es proyectar una imagen corporativa completamente renovada, más cercana a la línea de seguridad europea, con una mayor visibilidad frente a los ciudadanos y una diferenciación del resto de servicios públicos que usan prendas de colores similares.
La actual uniformidad azul incorpora elementos reflectantes para que los ciudadanos identifiquen de manera inequívoca a los agentes municipales durante la prestación del servicio.