Cañada es: 16 kilómetros de longitud, limita al norte con Coslada y al sur con Getafe, en el este está Rivas Vaciamadrid y hacia el oeste, Madrid. En estos 16 km viven más de 7.000 personas en más de 2.400 casas, todas son hogares aunque no todos los hogares son viviendas dignas, hay algunas súper chulas y la mayoría son viviendas, pero precarias.
Cañada es: droga, delincuencia, prostitución, tráfico de armas, gente chunga, explotación de personas. De esto sabemos mucho por los medios de comunicación, son las noticias que más repercusión tiene, pese a que esto solo sucede en 1,5 kilómetros, más o menos, de los 16.
Cañada es: un crisol de vida donde converge la esperanza, la perseverancia y el trabajo silencioso de tantas personas que luchan por un mundo mejor, por dar una oportunidad a las miles de personas que buscan una alternativa a una situación de precariedad. Pero de esto sabemos menos porque no sale tanto en los medios, pese a que es lo que sucede en 14,5 kilómetros, más o menos, de los 16.
Cañada es: La Parroquia de Santo Domingo de la Calzada, donde su cura, Agustín, es una de estas personas que hace un trabajo silencioso, pero algunos ya le hemos dicho que NO al silencio, que estamos hartos de noticias de drogas y cosas así, mientras, no se sabe nada de las Cocinas Solidarias, de los encuentros con Dignidad, etc, y tantas otras cosas buenas y solidarias que hace él junto a un nutrido grupo de voluntarios.
Cañada es: la fábrica de muebles, que se parece a una fábrica de sueños pero cuando llegas allí y ves, te das cuenta de que no es ensoñación, porque cuando abres la puerta de Cruz Roja ves a una treintena de mujeres aprendiendo cosas. O si pasas al espacio de El Fanal te encuentras con niños y niñas pequeños que pasan allí la mañana jugando y educándose. También hay un espacio donde unas monjas muy simpáticas, de Cáritas, atienden a todas las personas que piden algún tipo de ayuda, incluso el Ayuntamiento de Madrid tiene allí espacio para atender a las familias y a las personas que buscan empleo. Cañada también es la Fundación Secretariado Gitano y ACCEM y Arquitectura sin Fronteras y Alshorok y las asociaciones de vecinos. A todas también les hemos dicho que NO, no a que el trabajo siga siendo silencioso y prevalezca el ruido de los medios que intoxican al trabajo colaborativo, este se debe comenzar a escuchar, porque según nos dicen los que saben de esto hay que crear contra opinión para evitar los estereotipos.
Y Cañada es: Voces, a los que ahora la Unión de Actores les premia por su iniciativa del Festival Internacional de cine 16kms. Se les premia porque, al igual que ellos y al igual que nosotros, el Ayuntamiento, pensamos que la Cultura no es solo entretenimiento, sino una herramienta que cambia la sociedad, imprescindible en este mundo donde cada día la intolerancia, el racismo y la xenofobia y otras fobias, nos atenazan.
Voces, no es solo el Festival. Durante todo el año hasta que se extiende la alfombra roja, la alfombra de los vulnerables, de los que anhelan una vida más digna, la fundación realiza toda una labor educativa en valores, igualdad de género, capacitación, formación audio visual, música, etc. Su objetivo es acercar la cultura a aquellas personas que viven en el margen de la ciudad formal. Se pretende, además, combatir mediante la cultura los estereotipos creados y generalizados que sufren las mujeres, hombres, niñas y niñao de este asentamiento informal. Y desde el Ayuntamiento apoyamos y trabajamos con ellos, para romper con esta etiqueta de marginalidad. Porque mientras unos gritan «¡Más madera!» (Los hermanos Marx en el Oeste, preciosísima película), otros estamos más por «No tienes que representar ningún papel conmigo, no tienes que decir nada ni hacer nada. Sólo silba. ¿Sabes silbar, no? Juntas los labios y soplas». (Lauren Bacall en Tener o no tener), y esto es lo que ofrece Voces: estar ahí, como el resto de entidades que trabajan en Cañada, como algunas administraciones comprometidas que no representamos un papel para “salvar” a las personas desfavorecidas, a las vulnerables, aquí el papel principal, los actores y actrices son los ciudadanos y ciudadanas de Cañada.
Cañada es: Un kilómetro de droga y marginalidad y 15 (6.500 personas) de un crisol de culturas, de esperanza, de niños y niñas ávidos por hacer y ver cine, de miles de padres preocupados por educar a sus hijos, miles de personas que desean tener una casa digna, vivir en un barrio digno, en condiciones dignas y esto, acercar la cultura a Cañada es también reivindicar el Derecho a la Ciudad, y Madrid lo va intentar.