En línea con el firme compromiso del Ayuntamiento de Madrid por lograr una ciudad más abierta y accesible, eliminando cualquier barrera que pueda dificultar la participación social y el acceso a cualquier servicio comunitario, la Empresa Municipal de Transportes (EMT) ha recibido el reconocimiento de la ONU por su apuesta para permitir que todos los madrileños y visitantes podamos acceder a sus más de 1.900 autobuses.

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Imagen de un elemento del Sistema de Embarcado de Información Acústica (SIENA).

El Sistema de Embarcado de Información Acústica (SIENA) que desde 2009 informa en el interior de todos los autobuses de la capital mediante mensajes escritos y orales acerca del nombre de la próxima parada, destino u hora y en el exterior mediante voz del número de la línea de autobús y el sentido de la misma, ha sido seleccionado como uno de los cinco casos de éxito en el mundo en materia de buenas prácticas para el desarrollo urbano sostenible por parte de la ONU.

Este es solo un ejemplo del arduo trabajo en materia de accesibilidad que durante varios años lleva desarrollando la EMT. En la actualidad, sus 1915 autobuses hacen la vida más sencilla a los madrileños contando con piso bajo y sistema de inclinación para que la altura del escalón sea lo menor posible y con rampa de acceso para personas en silla de ruedas.

REPORTAJE PARA EL INFORME ANUAL DE LA EMT DE 2008 REALIZADO EN MAYO DE 2009
Elemento del sistema SIENA que informa de la fecha, hora y temperatura interior y exterior.

Con el fin de ir más allá de lo exigido por normativa, la mitad de la flota de la EMT cuenta con una plataforma central amplia que permite el uso de cochecitos de niños y de sillas de ruedas.

Todos los nuevos autobuses que se incorporan a la flota de EMT a partir de este año dispondrán de plataforma doble que permite el viaje simultáneo de dos sillas de ruedas para personas con movilidad reducida.

Para informar al cliente de todos los nuevos sistemas accesibles de los autobuses se ha iniciado un proceso de formación interno del personal de la EMT, realizándose actividades como la formación del personal de atención al cliente en la interacción con personas de movilidad reducida, y en lengua de signos.

En resumen, se trata de una apuesta por lograr una ciudad más accesible a través de intervenciones en el transporte, uno de los elementos clave para vertebrar y favorecer la participación social.