Los bomberos conmemoran la festividad de su patrón San Juan de Dios el día 8 de marzo, desde el año 1953. Al santo se le atribuye el rescate de las llamas de unos enfermos del hospital de Granada a mediados del siglo XVI. Por esta época, en Madrid, el Consejo de la Villa creó el Servicio Contra Incendios en el año 1577 sucediéndose medidas y procedimientos hasta que en 1894 se organizó el Cuerpo de Bomberos.
La historia del Servicio de Bomberos va ligada a la creación, evolución y aplicación de diferentes sistemas de comunicación, que todos los que sientan curiosidad pueden conocer visitando el Museo de los Bomberos.
De los toques de campana al Campana
Hasta el siglo XX, el toque de las campanas de las iglesias alertaba al personal de oficios responsable de la extinción de incendios y a los bomberos sobre el barrio en el que se había desatado el fuego. Otro medio de aviso fueron los pulsadores fijos de las calles que disparaban una alarma en los parques cuando eran pulsados por los serenos o la policía.
Con el siglo XX llegarían las centralitas telefónicas y los números de los bomberos: el 33232 , el 53232 ,el 080 y el 112 , número compartido con los otros servicios de emergencias y común en Europa. Las cabinas telefónicas fueron un soporte valiosísimo para los bomberos porque a menudo tenían que informar desde ellas a los parques, puesto que los sistemas de comunicación por radio analógica no funcionaban demasiado bien.
Como curiosidad, aún hoy al bombero más joven de la dotación se le llama Campana, en recuerdo del bombero que tocaba la campana colgada en la parte exterior delantera del vehículo, antes de que llevasen las sirenas.
En las décadas de los años 80 y 90 se implantó la primera red de radio, los primeros sistemas telemáticos, la radio digital y la cartografía. En la década de los años 2000, los equipos de los vehículos se informatizan, introduciendo sistemas de navegación que ayudan a llegar en el menor tiempo posible a todos los sitios, utilizando también la cartografía navegable. Ahora los bomberos disponen de equipos informáticos portátiles y de un protocolo de comunicación. Los nuevos sistemas telemáticos dejaron atrás los equipos de radio de los coches de bomberos procedentes del ejército y también el sistema de comunicación a toque de corneta en el que cada toque tenía su significado.
La tendencia en los últimos años es la incorporación de los bomberos a los servicios de emergencias del Samur y Policía Municipal, integrándose en el Centro Integrado de Seguridad y Emergencias de Madrid (CISEM).