Durante las últimas décadas Madrid ha experimentado un largo e intenso proceso de centralización política, económica y administrativa. Un proceso que ha ido vaciando de contenido y posibilidades a aquellos órganos municipales mas cercanos a los vecinos y vecinas de nuestra ciudad: las Juntas de Distrito. En este proceso se han visto mermadas tanto las posibilidades de participación ciudadana, como la eficiencia muchos delos servicios municipales que garantizan la calidad de vida en nuestros barrios (cuidado y mantenimiento de jardines, obra pública, limpieza,…)
El principal reto que afronta nuestro área de gobierno es el proceso de descentralización de la estructura municipal, un paso necesario para mejorar la calidad de vida en nuestra ciudad. Así es reconocido por buena parte de la sociedad civil organizada y así ha sido recogido en los programas electorales de la totalidad de las fuerzas políticas que concurrieron a las elecciones municipales. La planificación y desarrollo efectivo de este proceso de descentralización será una de las principales tareas de este Área de Gobierno.
Se trata de acercar a la ciudadanía los lugares desde los que se gestionan los servicios y prestaciones públicas, los centros donde se toman las decisiones. Actualmente las Juntas Municipales de los 21 distritos padecen grandes dificultades para ejercer sus competencias y gestionar su territorio con garantías de eficacia. Este es, por tanto, un momento idóneo para repensar nuestras formas de construcción de la ciudad con el objetivo de reorientarla hacia un modelo más participativo, sostenible y cohesionado.
El desarrollo de una coordinación efectiva entre las áreas de gobierno y las Juntas de Distrito, resulta en este momento imprescindible como paso previo a este proceso de descentralización y como garantía a que este se hará de manera ordenada y eficiente.
La corrección de los enormes desequilibrios que sufre Madrid así como la representación de los intereses de los diversos barrios del municipio requieren de unas Juntas de Distrito fuertes y coordinadas como instrumento esencial. Impulsar y coordinar la relación entre las Áreas de Gobierno y los distritos, propiciar un mayor protagonismo de estos en la labor de gobierno municipal, y garantizar que las políticas públicas municipales se desplieguen por todo el territorio de la ciudad. Son parte de una labor de coordinación territorial que durante años ha estado relegada y ha sido casi inexistente.
Cercanía, reequilibrio, participación… nada de esto sería posible sin la presencia activa de una sociedad civil vertebrada y organizada que garantiza y da contenidos a los procesos de deliberación y participación colectiva que sustentan la posibilidad de una democracia más participativa. Nuestro área impulsará programas para fortalecer el tejido asociativo y colectivo en toda su diversidad, dotándole de recursos, abriendo espacios a la gestión ciudadana, impulsando la modificación de los reglamentos que regulan de un modo restrictivo la participación vecinal y ciudadana. Nuestro objetivo es un Ayuntamiento más cercano y abierto, en el que la voz de los y las vecinas tenga un papel preponderante.
Madrid necesita un proyecto coherente de ciudad, capaz de integrar diferentes visiones y formas de vivirla, de reequilibrarla territorialmente. Madrid necesita ser una ciudad hecha por y para sus ciudadanos, en la que las instituciones sean un cauce, un motor, nunca más un muro. Vamos a ello.