La primera teniente de alcalde y delegada de Equidad, Derechos Sociales y Empleo, Marta Higueras, y el consejero de Servicios Sociales y Familia, Carlos Izquierdo, han firmado hoy un protocolo de colaboración para garantizar la atención de los jóvenes una vez que abandonan la residencia infantil y regresan a vivir con su familia de origen. El tránsito no sólo es hacia la mayoría de edad, sino que se trabaja para que tengan un nuevo proyecto de vida personal y laboral. La firma ha sido en el salón de actos de la UNED, en las Escuelas Pías, organismo que está trabajando en la investigación de la ejecución del Plan de Autonomía.
El Ayuntamiento de Madrid apuesta por esta colaboración para seguir apoyando a las y los jóvenes (de 16 a 21 años), acompañándoles, en esta nueva etapa de incorporación a la sociedad. En este sentido desde el Consistorio se va a priorizar las actuaciones en el entorno familiar y social con los recursos de los propios servicios sociales en coordinación con otros organismos. Se establecerá un sistema ágil de derivación y coordinación entre profesionales de la Comunidad y el Ayuntamiento para que el tránsito de los menores a la vida adulta se realice con garantías de inclusión social, con el apoyo y los recursos necesarios.
La Comunidad de Madrid dispone de un Plan de Autonomía para jóvenes de entre 16 y 21 años, tutelados y ex tutelados, que les permite atender las necesidades de preparación para la vida independiente, garantizándoles el acompañamiento educativo y las prestaciones que puedan necesitar hasta su emancipación.
La Dirección de Familia e Infancia va a trabajar en la atención al joven y a sus familias en el domicilio familiar para superar las dificultades de la reunificación y convivencia en el hogar; el acompañamiento al joven para promover su autonomía y su incorporación a la comunidad: informar y orientar sobre sus derechos y sobre el uso adecuado de los servicios sociales, educativos, sanitarios culturales y de ocio, así como acompañarles físicamente a instituciones y entidades a fin de promover su autonomía; y en la atención a los jóvenes en grupos socioeducativos: mejora de las competencias personales en las relaciones, adquisición de hábitos, comportamientos, apoyo mutuo y motivación entre los participantes.
Además, el Área cuenta con el programa especializado de Apoyo Socioeducativo y Prelaboral de Adolescentes (ASPA) que atiende a jóvenes de 12 a 21 años. Su línea de trabajo se centra en compensar déficit personales, familiares y sociales tanto en adolescentes como en jóvenes en situación de riesgo o conflicto social mediante actuaciones de carácter educativo, formativo, de atención psicológica, prevención de la violencia y de apoyo prelaboral./