Sesión de Formación con Marta Sánchez en el Centro Cultural Daoíz y Velarde

En 2002, en Rosario, Argentina, decidieron enfrentar la crisis económica lanzando un programa de Agricultura Urbana. El programa trabaja desde  el «consumo familiar y comunitario y la construcción de mercados alternativos contribuyendo a la integración social, la superación de la pobreza, el mejoramiento del hábitat y del ambiente urbano». Con ello reforzaban una línea de trabajo iniciada dos décadas antes y que les ha convertido en una referencia mundial como ciudad verde e innovadora, como reconoce la FAO.

Aprovechando la visita a Madrid de Marta Sánchez, Jefa de Diseño de Proyectos socio-productivos de la Secretaría de Economía Social, desde el equipo redactor de la Estrategia Alimentaria organizamos una sesión de formación abierta a quienes han participado en el proceso de elaboración de la misma.

Economía social y agricultura urbana

En 2002 la ciudad de Rosario (Argentina) lanzó el Programa de Agricultura Urbana en colaboración con el proyecto Pro-Huerta del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) y el Centro de Estudios de Producciones Agroecológicas (CEPAR).

El Ayuntamiento de Rosario cuenta con una Dirección General de Proyectos Productivos dentro de la Secretaría de Economía Social. Marta nos explicó cómo esta dirección general desarrolla el Programa de Agricultura Urbana, que es el más importante en términos de visibilidad y técnicos municipales involucrados, y que se articula con otros programas relacionados, como el Programa de Empleo Verde, el Programa de Alimentos o el Programa de Servicios Generales.

Gracias al Programa “Rosario Emprende”, en 2 años casi 3.000 personas han recibido formación en la Escuela de Emprendedores. El perfil mayoritario es el de emprendedores familiares (con ideas de proyecto incipientes o en desarrollo), con una economía de subsistencia y con baja capitalización, que buscan en el emprendimiento por cuenta propia una salida laboral y un ingreso familiar. Todavía pocos están capitalizados y consolidados, pues la formación se da a gente expulsada del mercado laboral o que tiene autoempleo. Piensan en cómo dar seguimiento para ver resultados y tienen el desafío de encaminarse hacia dinámicas más comunitarias y cooperativas.

Otras ciudades también apuestan por la Agricultura Urbana.En el Atlas de Agricultura Urbana de Europa, encontramos multitud de ejemplos, aunque probablemente ninguno tan imbricado en políticas de economía social como el caso de Rosario. En Madrid, la Estrategia Alimentaria se plantea el reto de trabajar en ambos temas de manera combinada y el Programa MARES de Alimentación desarrolla un trabajo de promoción de iniciativas de economía social, algunas de ellas conectadas con proyectos de agricultura periurbana.

Una red de confianza

Espacios Agroecológicos Urbanos en Rosario. Fuente: Agriurbanarosario.com

En Argentina existe la figura del comodato, figura jurídica que consiste en la cesión de uso de un terreno/ superficie por un periodo determinado a un tercero. El Programa de Agricultura Urbana consiguió que el municipio pasara a gestionar  espacios marginales de la ciudad tales como laterales del trazado del ferrocarril (desmantelado en los 90), escombreras y basurales, etc. con el objetivo de convertirlos en Parques Huerta. En estos casos, fue necesario un gran trabajo de varios años para recuperar suelos (limpiar, abonar, tener agua…).
Entre los Parques Huerta, las huertas familiares en los distritos y los nuevos espacios en producción, hoy conforman en total algo más de 30 hectáreas de superficie total en producción. En el caso de los Parques Huerta, la superficie que se cede a cada familias esta en torno a 0,25- 0,5-1 ha, en función de las dimensiones y características de cada parque. Originariamente, la perspectiva priorizada fue la de la seguridad alimentaria. Aunque hoy se mantiene esta dimensión, buena parte de los huerteros comercializan su producción en los propios barrios, a través de la venta directa, el armado de bolsones, y las ferias de economía social.
Cada Parques Huerta, tiene un técnico de referencia, que da capacitación práctica en agricultura urbana, realiza seguimiento técnico-productivo, mantenimiento de las instalaciones, entre otros.

Más allá de cada parcela, el programa de Agricultura Urbana ha permitido, en palabras de Anonio Lattuca, uno de sus fundadores, crear una red de confianza entre gobierno y agricultoras/res urbanos.