En los últimos años ha ido creciendo el número y diversidad de huertos que podemos encontrar en Madrid. Además de los huertos comuntarios que nos ocupan, hay huertos terapéuticos ligados a centros de Madrid Salud, y una Red de Huertos Escolares Ecológicos en la que participan más de 130 colegios y en la que nos centraremos en una futura entrada…
El Programa Municipal de Huertos Urbanos Comunitarios, con un recorrido de 3 años, es un buen ejemplo de participación ciudadana, de cogestión de equipamientos públicos, y de colaboración público-social. Un modelo que merece la pena compartir y extender a otras ciudades, por este motivo en la Mesa de Seguimiento del Pacto de Milán se ha decidido que se presente a la convocatoria de premios 2017 del Pacto de Milán en la categoría de Gobernanza. El premio de esta convocatoria se destinaría a ejercer una labor de asesoramiento para replicar la iniciativa en otras ciudades adaptándolo a sus peculiaridades locales.
Más de 50 huertos comunitarios…
Hasta 2010 son escasos los ejemplos de huertos en nuestra ciudad, en ese año los huertos comunitarios existentes en distintos espacios de Madrid se comienzan a coordinar, la FRAVM crea una comisión de huertos vecinales para asesorar a asociaciones interesadas en desarrollar este tipo de proyectos, y se constituye la Red de Huertos Urbanos Comunitarios de Madrid (ReHd mad!), que en 2012 es reconocida como Buena Práctica de Sostenibilidad Urbana por Naciones Unidas.
Ante la multiplicación de huertos y respondiendo a la creciente demanda de espacios de cultivo en la ciudad, en 2014 el Ayuntamiento comienza a desarrollar su Programa Municipal de Huertos Urbanos Comunitarios, considerando la necesidad de regularizar las distintas situaciones de los huertos existentes y de mejorar el estado de precariedad en el que se encontraban muchas iniciativas (sin posibilidad de acceso a agua, por ejemplo). El programa se coordina desde el Departamento de Educación Ambiental del Área de Gobierno de Medio Ambiente y Movilidad.
El procedimiento para la cesión de estos espacios comienza con la identificación de áreas vacantes en los distintos distritos aptos para su uso como huerto, en general se trata de suelos calificados como zona verde. Se realiza un concurso público para su cesión temporal, en el que pueden participar asociaciones sin ánimo de lucro que presentan un proyecto comunitarios de carácter ambiental, educativo, social… que desarrollarán en ese espacio.
Todos los huertos parten de unos mismos recursos básicos facilitados por el Ayuntamiento: vallado perimetral, acometida de agua, caseta de herramientas, tierra vegetal y abono, panel informativo, y periódicamente se ofrece plantón de los viveros municipales y otros materiales que pueden ser de utilidad como tablones de madera. Sin embargo cada huerto es diferente, pues las personas que participan en ellos definen el diseño, construye sus bancales de cultivo y el mobiliario para las zonas de descanso, deciden qué se planta y dónde, tanto hortalizas, como frutales, aromáticas o plantas ornamentales… realizan colaboraciones con distintas entidades y colectivos de sus barrios, y actividades abiertas. Así cada huerto tiene su propia personalidad, que responde a los espacios y personas que los conforman, en un ejemplo de lo que a la gente que forma la RedhMad! le gusta denominar “hortodiversidad”.
Más allá de la actividad hortelana, los huertos comunitarios se han convertido en centros sociales y culturales al aire libre, de esta forma mientras en el huerto de Manoteras en Hortaleza son habituales los conciertos de arpa en las noches de verano, y en el huerto de Adelfas en Retiro se puede participar en una tertulia filosófica en sus meriendas epicúreas, el huerto de la Cornisa celebra picnics solidarios para recaudar fondos para organizaciones sociales (contra la violencia de género, por los refugiados, etc)… además de muchas otras actividades que podéis encontrar en vuestros huertos más cercanos.
También se realizan eventos conjuntos, como bicicletadas, encuentros, ferias… y para aquellas personas que se inician en el mundo de la agricultura urbana se han facilitado recursos formativos, tanto en el Centro de Información y Educación Ambiental El Huerto del Retiro, como a través del programa Ciudad Huerto, en sus talleres itinerantes por distintos huertos de la ciudad, una buena oportunidad para aprender a la vez que se conocen distintos huertos de la ciudad.
Está previsto que este verano comience la construcción de la Escuela Municipal de Huerta Urbana de San Fermín, en el distrito de Usera, un espacio con un interesante pasado en relación a los huertos urbanos, ya que hasta principios de este siglo acogía numerosas huertas en precario. En el proceso de definición de la Estrategia Alimentaria se han debatido propuestas concretas para este espacio, como es su consolidación como cuña agraria, siguiendo el curso del Manzanares en el sureste de Madrid. Una forma interesante de configurar una red de espacios productivos que supere el límite municipal y apunte hacia una conexión física urbano-rural.