Continuamos promoviendo la alimentación saludable y sostenible desde la RHES, este mes os presentamos un cultivo que crece a lo largo del invierno en vuestros huertos: el brócoli.

En el último mes de este 2023, conoceremos su origen e historia, como recolectarla y qué beneficios aporta a nuestra salud su consumo.

El Brócoli es una variedad de la especie Brassica oleracea (var. botrytis) y pertenece a la familia de las brasicáceas o crucíferas. Es pariente de otras plantas comestibles como el repollo y la coliflor (haz clic AQUÍ para ver la entrada sobre esta hortaliza).

Su historia va ligada a la de la coliflor, tanto que en algunas zonas el brócoli se llama coliflor de invierno y la verdadera coliflor es conocida como coliflor de verano. No hay una teoría totalmente aceptada sobre su origen, sin embargo se cree que hace varios miles de años, se domesticó una forma silvestre anual en la región del Mediterráneo oriental. Este brócoli ancestral se expandió luego por otras zonas del Mediterráneo y hacia China hibridándose aquí con otras formas de coliflor. Los tipos que son más comunes hoy en día son fruto de una selección hacia una inflorescencia terminal verde menos compacta de las de la coliflor. Esta inflorescencia se llama pella y es la parte que se consume de diferentes formas, junto a las hojas y tallo.

En principio, el brócoli era cultivado para sus propiedades curativas, para aliviar dolores de cabeza o la diarrea. Fueron los romanos quienes empezaron a cultivarla para su consumo y comercialización, y la introdujeron en varias zonas del imperio. Sin embargo, tenemos que esperar hasta el siglo XVI para que el cultivo del brócoli se generalizara en Europa, llegando a España en el siglo XVIII.

Es una hortaliza invernal aunque la encontramos en las tiendas durante todo el año. Las inflorescencias se cosechan antes de que se empiecen a abrir los tallos, es decir cuando estén compactas y de un color verde oscuro. Hay que cortar el tallo unos centímetros por debajo de las inflorescencias en diagonal, dejando algunas hojas a protección de las mismas. El brócoli después de la cosecha del tallo principal, puede formar nuevos brotes de las axilas de la planta y darnos nuevas cosechas, de menor tamaño.

Las variedades cultivadas han dependido del sistema de autoincompatibilidad, es decir la incapacidad de producir semillas por autopolinización. Actualmente, hay una tendencia al uso de híbridos a la vez que se mantienen algunas variedades más comunes. Un ejemplo de nueva variedad es el romanesco, que se está expandiendo rápidamente por Europa y América del Norte. Entre las variedades tradicionales, la más común es el brócoli de Calabria, llamado así por la homónima región italiana.  España es uno de los principales productores de brócoli y coliflor, ocupando el cuarto puesto, siendo Murcia y Alicante las principales zonas productoras.

Conoce más sobre esta hortaliza y sus beneficios descargándote el documento “La hortaliza del mes: Brócoli”, haciendo clic AQUÍ o en la imagen siguiente.

LA REDCETA

En esta ocasión os proponemos un primer plato: Brócoli gratinado al horno. Haz clic AQUÍ o en la imagen inferior, y accede a la receta de este mes.

¿Y vosotros/as? ¿Cómo consumiréis el brócoli que recolectéis en vuestro huerto? Animaros a compartir vuestra receta y mándanosla a redhuertoescolar@madrid.es. Descargar AQUÍ la plantilla, completarla y enviarla en un archivo PDF. En la imagen inferior podéis ver cómo descargar la plantilla.

Al final de mes publicaremos todas las recetas que nos enviéis de este cultivo, creando entre todos/as el libro de recetas de la RHES.

¡Animaros a participar, crearemos un libro de recetas saludables y sostenibles de la RHES!