Nombre común: Acelgas

Nombre científico: Beta vulgaris subesp. vulgaris

Las acelgas son uno de esos cultivos que podemos encontrar en el huerto durante muchas épocas a lo largo del año, ya que presentan una muy buena tolerancia tanto a las bajas como a las altas temperaturas, aunque conviene protegerlas de las heladas. Se trata de una planta autóctona que puede asilvestrarse con facilidad, por lo que es frecuente encontrarnos con acelgas en lugares del huerto donde nos las hemos sembrado ni plantado conscientemente.

Este cultivo tiene su origen en la región Mediterránea, cuyo consumo está datado desde el Neolítico, tanto para alimentación humana como animal. Pero no fue hasta la llegada de los árabes cuando esta hortaliza comenzó a cultivarse y a emplearse por sus propiedades medicinales y terapéuticas.

 

Las acelgas tienen como ventaja que podemos sembrarla de forma directa en el huerto entre los meses de primavera y otoño, o en semilleros durante los meses de invierno y trasplantarla entrada la primavera.

¿Os habéis parado alguna vez a observar las semillas de acelga?

¡Son realmente curiosas y muy similares a las de las alcachofas!

 

 

 

Estos cultivos tienen otra curiosidad que puede sorprender a los y las más pequeñas del huerto, y es que sus tallos o pencas pueden adquirir tonalidades muy variadas, lo que nos puede servir para trabajar los colores. También hay variedades con la penca más o menos grande.

 

En cuanto a sus necesidades, las acelgas se adaptan bien a casi todo tipo de tierras, aunque tienen preferencia por suelos mullidos, profundos y ricos en humus. Es importante respetar los marcos de plantación (40 x 30 cm) ya que, aunque cuando las trasplantemos, apenas medirán unos 5 cm, luego pueden alcanzar alturas gran tamaño. Además, necesitan de aportes de agua  frecuentes, pero sin excesos.

 

Al tratarse de plantas rústicas, no requieren de muchos cuidados ni mantenimiento. Simplemente habrá que permanecer atentas/os durante las primeras semanas para prevenir del ataque de caracolas, babosas o pájaros. También habrá que permanecer atentas/os de la aparición de manchas blancas en sus hojas, ya que podría encontrarse afectada por el hongo “mildiu”, sobre todo a comienzos de la primavera.

En el huerto podemos asociarlas con cebollas para aprovechar mejor el espacio.

Para cosecharlas, podremos ir tomando las hojas a medida que vayan alcanzando tamaños deseables, o esperar a sacar la planta al completo.