Últimamente, cuando legamos a los coles cada mañana, nos encontramos un habitante madrugador: una fina capa de hielo en suelo, mesas y plantas. Antes de que tenga un efecto negativo, es importante proteger nuestros cultivos, sobre todo ante las dos semanitas que se van a quedar solos durante las vacaciones.
Os recordamos que es fundamental acolchar el suelo en invierno, no solo porque protegerá del frío a vuestras plantas, sino porque tiene otras muchas ventajas. Además podéis instalar mantas térmicas o añadir infusiones de potasio con cáscaras plátano como os recomendamos en esta entrada del blog.
¿Qué es el acolchado? Es una práctica agrícola (mulching en inglés), que consiste en cubrir con materia vegetal seca el suelo en el que se desarrolla el cultivo. Se puede realizar con paja, hojas secas, heno, hierba segada (sin semillas, porque sino crecerán), serrín o incluso cartón.. Esta capa protege las raíces del frío al hacer de escudo contra la escarcha.
Algunos de sus beneficios más importantes son:
- Conserva la humedad del suelo suponiendo un ahorro en el agua de riego
- Protege del frío y mantiene una temperatura constante
- Evita el crecimiento de plantas espontáneas o adventicias al dar sombra.
- Mejora la estructura del suelo, y evita que la radiación solar afecte a la microbiota del mismo. Además, no se apelmaza por lo que favorece la aireación y evita el tener que labrar.
- Protege de la erosión por el viento
- Es un aporte de materia orgánica que se descompondrá aportando nutrientes al suelo
- Mejora la actividad de los microorganismos
Como veis tiene múltiples ventajas, sin embargo, es importante prestar atención a cómo se ha de colocar para no poder desencadenar otros problemas:
- No lo coloques pegado al tallo de la planta para evitar la proliferación de hongos.
- El grosor depende del material que utilices, normalmente se instala una capa de 3 a 5 cm pero si es más seco y ligero ha de ser más grueso (5-7cm) pero permitiendo la circulación del aire.
- En suelos que se compactan, es más beneficioso la paja, el heno o el serrín.
- Si utilizas materiales que se descomponen rápido como las hojas, requiere un mantenimiento mayor.
- Riega tras colocar el acolchado.
La paja es el acolchado más eficiente debido a su estructura hueca que aísla del frío y porque está libre de semillas, además la celulosa se descompone por los microorganismos pasando a formar parte del suelo. Por eso os recomendamos haceros con una buena alpaca y enseñar a vuestro alumnado esta práctica tradicional, ecológica y tan beneficiosa.
¡Buena semana hortelanas y hortelanos!