La jornada, que se celebrará a lo largo de esta mañana, la ha inaugurado el Concejal del distrito, Pablo Carmona, quien en su intervención ha puesto de relieve que hablar de vulnerabilidad en este distrito era hasta hace poco un estigma, como si no hubiesen necesidades ni problemas. Así mismo ha dicho que Salamanca es uno de los distritos donde más cuesta acercarse a los Servicios Sociales. Se trata de que las soluciones no sean individuales, sino que podamos hacer empoderamientos, entornos sociales de cuidadores, de las personas que tengamos más cerca. Ha finalizado sus palabras pidiendo a los profesionales de los servicios sociales que presenten al Ayuntamientos sus ideas, sus sugerencias y sus reclamaciones, para mejorar las intervenciones y detectar la vulnerabilidad.

Fortaleza y debilidad de los Servicios Sociales

En la Mesa Servicios Sociales del Distrito de Salamanca, que ha dado comienzo a continuación, han participado la Jefa del Departamento de Servicios Sociales del Ayuntamiento,  Marian Caballero, la psicóloga de la delegación de Madrid de Atenzia, Pilar García Flores, y el voluntario del distrito,  Miguel Fernández. Marian Caballero ha ofrecido unos datos sociodemográficos, según los cuales, Salamanca es uno de los distritos con mayor porcentaje de mayores y con un índice de envejecimiento superior a la ciudad de Madrid. Además, es el segundo distrito con la pensión media más alta, superado por Chamartín. También se ha referido al diagnóstico social del distrito, con actuaciones como la elaboración de una base de datos de las Instituciones que trabajan en el distrito, la creación de un grupo de discusión o la realización de 350 encuestas online.

Según Marian Caballero, la fortaleza consiste en la profesionalidad de los trabajadores de los servicios sociales y la debilidad en el hecho de que el 54% de los vecinos no son conocedores de los servicios sociales, carecen del sentimiento de la universalidad de los servicios sociales, y por último falta personal para atender a los mayores. Ha hecho mención, entre otros, a los programas de teleasistencia, ayuda a domicilio, a los cuidadores o terapia ocupacional. Como propuestas más novedosas ha citado el trabajo en red con las entidades e instituciones públicas y privadas, los planes de comunicación, o el que los cuidadores sean Agentes Sociales.

El Proyecto de Vulnerabilidad

Por su parte, Pilar García de Atenzia ha presentado el Proyecto de Vulnerabilidad del distrito. En primer lugar ha hablado de la detección de la vulnerabilidad y del plan de trabajo, con una primera fase de toma de datos consistente en la realización de más de de 9000 llamadas telefónicas a 4000 domicilios, seguida de comunicación por correo y visitas domiciliarias. Ha resaltado la importancia de las redes de apoyo, citando las siguientes conclusiones del proyecto:  Se han acercado los servicios sociales a 4.500 personas que no tenían un contacto anterior; el 42,9% de la información se obtiene del entorno vecinal. Hay que recuperar la red de agentes y prevenir el riesgo; No se ha podido llegar a cerca de 1000 personas en los tres años que ha durado el estudio.

La Mesa ha concluido con la intervención del voluntario Miguel Fernández quien habló de la colaboración de los voluntarios en dos actividades: acompañando a los mayores de 80 años para pasear o visitarlos en sus domicilios, a lo largo de dos horas en semana, o acompañándoles en sus visitas médicas a los hospitales y ayudándoles a realizar trámites. El total hay 30 voluntarios y tan sólo 4 son hombres.

Qué es la Autonegligencia en personas mayores

La primera parte de la jornada antes del descanso, ha finalizado con la conferencia marco de Carmen Touza, profesora titular en Trabajo Social de la Universidad de las Islas Baleares, sobre la Autonegligencia en Personas Mayores. Un concepto que admite muchos y variados matices, que se relaciona con la vulnerabilidad y los malos tratos. Entre otras definiciones está la que considera la Autonegligencia como una conducta personal caracterizada por el rechazo a los servicios adecuados y que pone en riesgo a esas personas.

Se habla de riesgos personales- falta de higiene, carencia de servicios socio sanitarios, riesgos medioambientales –suciedad en los domicilios, etc. La profesora Touza ha planteado los problemas que surgen cuando las personas son plenamente conscientes del rechazo de los servicios o bien cuando están capacitadas para determinados actos y para otros no. ¿Qué hacer? Prestar o no los servicios sociales a estos colectivos. Se plantean problemas de respeto a los derechos de las personas, problemas éticos y cuestiones como cuándo se debe o no intervenir. Una problemática que precisa de una red de apoyo social.

Los interesados en ser voluntarios de distrito pueden contactar con ellos en esta dirección.