El Retiro no solo alberga árboles singulares, jardines de selectas especies, edificios icónicos como los palacios de Cristal y de Velázquez, el gran estanque y otros edificios dotacionales como el Centro Cultural Casa de Vacas y la biblioteca Eugenio Trías, entre otros. Sus rincones y plazuelas se encuentran jalonadas con fuentes y esculturas realizadas por importantes escultores como el monumento dedicado al general Martínez Campos, obra de Mariano Benlliure, declarado Bien de Interés Cultural (BIC) en 2013 y que actualmente el Ayuntamiento, a través de la Dirección General de Patrimonio Cultural, está restaurando con la asesoría técnica del Ministerio de Cultura y Deporte.
El estado de conservación de la escultura en bronce es adecuado, aunque la pátina se encuentra algo inestable y cubierta con una película de suciedad y de depósitos de restos vegetales y de anidamientos de aves. Además, sufre patologías propias de las obras metálicas expuestas a la climatología. En cuanto al pedestal, su actual estado de conservación está igualmente relacionado con la ubicación del monumento y su exposición a los agentes ambientales, así como con las acciones derivadas de anteriores intervenciones.
La actuación en el monumento, dada la complejidad de su conservación, supondrá el desarrollo de un estudio documental y analítico de la obra y un diagnóstico exhaustivo de su estado de conservación y patologías. En las tareas participarán conservadores-restauradores especializados en materiales pétreos y metálicos y, tras la intervención, se elaborará un plan de conservación preventiva que asegure su adecuado mantenimiento y control.
Los trabajos, que comenzaron el pasado 20 de julio y finalizarán a comienzos de octubre, supondrán una inversión de más de 31.000 euros.
La construcción del monumento al capitán general Arsenio Martínez de Campos y Antón fue promovida por el marqués de Cabriñana y financiada mediante suscripción pública. Fue inaugurado el 28 de enero de 1907 en el lugar donde se hallaba el estanque de los Cisnes en el parque de El Retiro, si bien la plaza que lo rodeaba fue remodelada y embellecida tras la Guerra Civil, sustituyendo la barandilla metálica y el ajardinamiento de su alrededor por una lámina de agua sobre la que hoy se levanta el monumento.
El encargo a Benlliure se realizó mediante la convocatoria de un concurso público del que resultó ganador el escultor. La obra centra la atención en la figura en bronce del general montado a caballo y sobre un promontorio, sin nada que reste protagonismo a la escultura. Su pedestal, de planta rectangular, está ligeramente escalonado y remata en un podio donde un bajorrelieve en piedra de Novelda representa un episodio de la batalla de Castillejos, en la que tomó parte Martínez Campos.
La restauración del monumento se enmarca, en un amplio programa de actividades culturales que el Ayuntamiento está desarrollando a lo largo del año para conmemorar el 75 aniversario de la muerte de Mariano Benlliure.
El programa incluye además la limpieza y reparación de otros monumentos de titularidad municipal cuya autoría corresponde —de forma total o parcial— a este escultor, como los dedicados al teniente Ruiz, situado en plaza del Rey; a Goya (1902) y a María Cristina de Borbón–Dos Sicilias (1889-1893), ubicados en el entorno del Museo del Prado, así como la estatua ecuestre de Alfonso XII (1901-1909) y los monumentos a la República de Cuba (1930-1952), y al periodista Miguel Moya (1927), que se encuentran en el parque de El Retiro./