El pasado viernes, 13 de julio, los educadores medioambientales salieron a la plaza Vieja para realizar una de sus primeras acciones de sensibilización sobre la importancia de mantener un barrio más limpio y sostenible. Con casi un centenar de participantes, el éxito de la iniciativa ‘En fiestas, cuidamos Vallecas’, estuvo asegurada.
Durante toda la mañana, se celebraron diferentes talleres, a los que estaban invitados niños y niñas, con edades comprendidas entre 6 y 11 años, en los que aprendieron la importancia de reciclar para cuidar el medio ambiente y para conseguir que su barrio esté más limpio en las calles y las plazas en las que ellos juegan y pasean.
Los diez monitores que acudieron a esta convocatoria, pudieron comprobar que es uno de los lugares más transitados de Puente de Vallecas. En las dos carpas que se instalaron para la ocasión, practicaron eco-baloncesto con sus visitantes. Los pequeños deportistas que lograban encestar el material reciclable en el lugar correcto, recibían un premio simbólico.
También hubo participantes que quisieron contribuir con sus dibujos en la tarea de enseñar a los adultos dónde debían depositar las basuras durante las fiestas. Entre todos, realizaron carteles para colocar cerca de los contenedores que la junta municipal ha distribuido durante las fiestas. Para finalizar, los niños y niñas que visitaron la plaza Vieja, vivieron una auténtica fiesta de animación, con pinta-caras incluido.
Padres y madres, junto con personas procedentes de todas las asociaciones de este distrito, también quisieron sumarse a esta celebración medioambiental, jugando a un ‘eco-bingo’, en el que los educadores lanzaban una pregunta, cuya respuesta debía ser cantada para completar lo antes posible su tarjeta binguera.
Cuidamos Vallecas de forma pro-activa
En esta primera ocasión el proyecto ‘Cuidamos Vallecas’ se dio a conocer a la ciudadanía, dando un importante servicio de información para que las personas que fueran a participar en las fiestas fueran pro-activas, a la hora de depositar residuos en los lugares adecuados.
Grandes y pequeños se marcharon con el deseo de extender este tipo de acciones al resto de barrios vallecanos. Lo más positivo para padres y madres, fue la idea de enseñar a los más pequeños, mediante juegos, la importancia de cuidar y respetar el entorno en el que viven.