Respirar aire limpio es un derecho de toda persona. La contaminación atmosférica causa graves daños a la salud y al medio ambiente. Los más afectados son los niños y niñas, las personas mayores, las mujeres gestantes y quienes padecen enfermedades respiratorias y cardiovasculares.
En los últimos años, está aumentando la preocupación por un contaminante muy singular, que no sale de las chimeneas ni de los tubos de escape, y que afecta más a las zonas rurales que a las grandes ciudades: el ozono troposférico.
El origen de este problema se encuentra en las emisiones de otros
contaminantes llamados “precursores”, producidas por el tráfico,
las industrias y las calefacciones. Estos contaminantes precursores se transforman en ozono, en presencia de radiación solar.
La contaminación por ozono troposférico causa cada año 17.000 muertes prematuras en la Unión Europea, 1.800 de ellas en España.
Dos terceras partes de los cultivos y buena parte de nuestros bosques y espacios naturales soportan niveles de ozono que dañan la vegetación.
Una calidad del aire adecuada debe pasar por que la ciudadanía conozca en todo momento el estado del aire que respira, y por que se establezcan planes de acción que reduzcan la polución causada por el ozono y sus contaminantes precursores.
La exposición se puede visitar en el horario de apertura del centro:
MEDIDAS ESPECIALES.
Debido a la situación de excepcionalidad, la visita se desarrollará respetando cuidadosamente las medidas de seguridad dictadas por el Ayuntamiento de Madrid:
Es obligatorio el uso de mascarilla durante toda la visita a la exposición.
Los visitantes deben guardar una distancia social entre sí de al menos 1,5 metros.
No se podrán intercambiar materiales de ningún tipo durante la visita ni tocar elementos naturales o expositivos.
El número de visitantes para ver la exposición será de 3 personas, estableciéndose turnos en el caso de ser más.
Se ruega a quien sospeche que presenta algún síntoma de la COVID-19, se abstenga de asistir a la exposición.