El pasado 19 de junio, organizamos una ruta botánica de plantas comestibles y otros usos con un nombre muy original “Ensalada de la Villa”.
Una ruta novedosa en la que queríamos poner la atención en multitud de plantas comestibles, algunas de las cuales, tienen propiedades medicinales. Plantas que vemos todos los días en nuestros paseos por la Dehesa y que, a partir de este día, seguro miraremos con otros ojos.
Al principio de nuestra ruta, y después de una breve reseña a la historia de la Dehesa, se explicaron las principales características y diferencias entre dos especies de pinos, muy abundantes y representativas en el parque de la Dehesa de la Villa, Pino Piñonero “Pinus Pinea”, y Pino Carrasco “Pinus halepensis”.
Pudimos observar diferentes especies arbustivas como:
La Lavanda “Lavandula” está presente en todo el litoral mediterráneo peninsular y en las islas baleares. Es un arbusto aromático caracterizado por su propiedades medicinales en el uso de infusiones o aceites esenciales, y su uso cosmético para la elaboración de perfumes y cremas.
Se utiliza como calmante, desinfectante, contra el insomnio, desinfectante, cicatrizante, antiinfecciosa, relajante,antiparasitaria, entre otras.
Serbal de cazadores “Sorbus aucuparia” . Aparece en toda Europa. En la Península es más abundante en el norte que en el sur. Caracterizada por su alto contenido en vitamina C y por su uso comestible para la elaboración de mermeladas y licores. Entre sus usos medicinales destacan sus propiedades anti-diarreicas, anti-infecciosas y astringentes.
Escarola o lechuga silvestre “Lactuca serriola”, la encontramos en gran parte de Europa. Tiene uso comestible con sabor más amargo a la lechuga tradicional. En su uso medicinal es caracterizada por sus propiedades sedantes y analgésicas. Además, los antiguos griegos creían que su jugo acre era un remedio contra úlceras en los ojos.
A parte de estas especies, se explicaron muchas que podréis encontrar en nuestro apartado de «Descargas» o en el siguiente enlace:
Además de estas interesantes y llamativas especies comentadas anteriormente, hicimos una parada en la zona dónde se encuentran los hoteles de insectos, una isla de biodiversidad para insectos polinizadores.
Finalmente, nuestra última parada fue en el Cerros de los Locos, lugar en el que se estaba celebrando, como cada año, con los vecinos de la zona, una exposición de fotos y artículos de noticia con todas las actividades y eventos que se han ido realizando a lo largo de los años de esta emblemática zona del parque de la Dehesa de la Villa.