Casa Labra, Calzados Pradillo, la chocolatería de San Ginés, Guitarras Ramirez, el restaurante Lhardy o el horno de San Onofre son algunos de los comercios, que permanecen activos desde que abrieran sus puertas hace un siglo en el centro de Madrid. Ellos representan el pasado, presente y, por qué no, el futuro de nuestra ciudad y son fácilmente reconocibles porque su estética no ha variado en cien años.

Madrid cuenta al menos con 186 comercios centenarios, de los cuales 62 se encuentran en el centro histórico de la ciudad, mientras que los restantes se reparten por otros distritos como Arganzuela, Chamberí, Fuencarral-El Pardo, Puente de Vallecas, Retiro, Salamanca, San Blas-Canillejas y Villaverde.

Sus fachadas de madera, cuidadas rotulaciones, sus ricas decoraciones adornadas de columnas de hierro fundido, espejos y mobiliario característicos de la época que les vio nacer les dotan a todos ellos de una rica decoración que conforma un legado histórico vivo digno de preservar.

Farmacia Reina Madre_Lucrecia Arria
Farmacia Reina Madre. Lucrecia Arria

Nos acercamos a la exposición ‘Comercios centenarios del distrito Centro’ ,organizada por la junta municipal del distrito, que estos días permanece abierta en el Centro Cultural Clara del Rey de la calle Amaniel, que reúne las obras del grupo de dibujantes urbanos, Escaparates de Madrid, autores de esta iniciativa que arrancó en 2019 con el objetivo de rendir homenaje y apoyar a los comercios centenarios de Madrid a través del arte. Aunque, por motivos de espacio la muestra recoge solo los comercios de este distrito, su calidad y la importancia que tienen estos establecimientos en la vida de toda la ciudad, te invitamos a conocerla, vivas donde vivas.

Ángela Morales, miembro de este singular grupo de dibujantes urbanos, nos cuenta cómo surgió la idea y cuál ha sido el proceso para materializarla.

“La idea nos la dio nuestra compañera Lydia que nos propuso hacer lo que había hecho otro grupo similar al nuestro en Zaragoza: dibujar escaparates de establecimientos centenarios en esa ciudad”.

Para llevar a cabo este proyecto consensuaron una serie de pautas: que fueran comercios como mínimo de 80 a 100 años de antigüedad y que no hubieran cambiado de actividad. Fijamos un día a la semana para retratarlos. “Les llamábamos antes para que nos confirmaran si reunían los requisitos y les informábamos de nuestra actividad. A veces contestaban los propietarios, otros eran los empleados, pero, siempre todos se portaron de maravilla”, nos detalla.

Decidieron entonces crear en Facebook un grupo donde tramitar las convocatorias y guardar nuestros dibujos, explica Ángela, que ha llevado la gestión y la relación con los comercios durante los últimos años. Y para que los comerciantes pudieran acceder a los álbumes con sus respectivas obras dedicadas a cada establecimiento, también crearon en Facebook, la página Escaparates de Madrid.

Grupo de pintores 'Escaparates de Madrid'
Grupo de pintores ‘Escaparates de Madrid’

Fue así como en noviembre de 2019 una veintena de pintores, autodidactas y profesionales de la animación, arquitectos e ilustradores comenzaron a retratar los escaparates de los establecimientos centenarios de Madrid. De todos estos trabajos, por exigencias de espacio en la sala, se seleccionaron para la exposición 61 obras de comercios ubicados solamente en el distrito Centro. La mayoría de ellas están realizadas con acuarela, acompañadas con rotulador, tintas, pluma y lápices de colores. Todas ellas, presentan la fecha de la fundación del comercio, el sello del establecimiento para dejar constancia de que la obra se ha realizado en el momento y, además, en las pinturas se pueden leer datos y anécdotas aportadas por los comerciantes en el momento. “Lo bonito era cuando dábamos con comercios familiares y que hoy en día siguen manteniéndolos abiertos las siguientes generaciones” relata Ángela.

Estos establecimientos, además de testigos del paso del tiempo, son auténticos referentes de la calidad y profesionalidad que late en el comercio de la ciudad, por el excelente trato que dan a toda su clientela y la gran especialización en los productos o servicios que ofrecen al público.

“Lo bonito era cuando dábamos con comercios familiares y que hoy en día siguen manteniéndolos abiertos las siguientes generaciones”

“Muchos de estos comercios han tenido que superar situaciones difíciles, como sobrevivir a la Guerra Civil y a los años de escasez y casi todos acumulan muchas historias”, continúa la pintora. Como ejemplo señala el taller de arreglo de calzado artesanal situado en Chamberí cuyo mostrador mantiene todavía la marca del obús que penetró en su establecimiento o el comercio situado en La Latina, cuyo sótano se utilizó como refugio de mucha gente durante el conflicto bélico español.

El correr de los años se ha cobrado la vida de algunos de estos establecimientos singulares bien porque la familia no ha querido seguir con la actividad o porque los alquileres han subido y no podían mantenerlos abiertos. El más antiguo de todos los establecimientos retratados es la farmacia de la Reina Madre, ubicada en la calle Mayor, fundada en 1548 y que algunos estudios asocian su posible origen a la botica que el alquimista veneciano de Felipe II de España tuvo en la calle del Sacramento,​ y al interés del monarca en conseguir algún tipo de plata alquímica para costear sus gastos de guerra.

Desde el año 2006, el Ayuntamiento de Madrid homenajea a los establecimientos centenarios de nuestra ciudad mediante la concesión de una placa, cuyo diseño fue realizado por el artista Antonio Mingote, que se coloca en la vía pública junto al comercio distinguido, y un diploma conmemorativo.

La exposición ‘Comercios centenarios del distrito Centro’ permanecerá abierta hasta el próximo 1 de marzo y se puede visitar gratuitamente.

Cartel Escaparates comercios centenarios