Situado en pleno centro de la ciudad y rodeado de grandes vías con mucho tráfico como el paseo de Recoletos, la calle Atocha o la Gran Vía, el barrio de Cortes atrae la presencia de un gran número de visitantes, tanto de otros barrios como de fuera de la capital. Esta situación genera un alto volumen de aparcamiento de rotación que dificulta que los residentes puedan aparcar cerca de sus domicilios.
Tras el cambio de regulación en las zonas de Embajadores, Justicia y Sol progresivamente desde el año pasado, ahora se suman las nuevas 112 plazas para residentes que el Servicio de Estacionamiento Regulado (SER) dispondrá en el distrito Centro para que su vecindario tenga menos problema de aparcamiento. Las plazas están localizadas en las calles Atocha (63), Virgen de los Peligros (13), Clavel (2) y paseo del Prado (34).
Con este cambio de color, el barrio de Cortes ya tiene el 100% de sus plazas verdes. Pendientes quedan las 10 plazas de la calle Arlabán y 5 de la calle Sevilla que, afectadas por los desvíos de las obras de Canalejas, no tienen plazas señalizadas a día de hoy, pero donde se recuperarán plazas para residentes una vez concluidas las obras.
El trabajo ha sido realizado desde el pasado 12 de marzo, por la Dirección General de Sostenibilidad y Control Ambiental del Área de Medio Ambiente y Movilidad, a través de su Unidad Técnica del Contrato Integral de Movilidad. Se trata de un trabajo de fácil ejecución y bajo presupuesto, que no requiere ningún tipo de obra ni cortes de tráfico y que mejorará el estacionamiento de vehículos de residentes.
Primera Fase de Madrid Central
En mayo se finalizó la sustitución de las plazas azules del SER a verdes en el barrio de Justicia y hasta mitad de julio está previsto realizar la misma actuación en Universidad (441 plazas azules que pasarán a residentes), finalizando con ello la reconversión de las plazas de rotación que todavía quedan en el distrito Centro.
Se trata de una de las medidas de la primera fase de la implantación de Madrid Central, la futura gran área de prioridad residencial que abarcará la práctica totalidad del distrito Centro y que completará su despliegue en noviembre, cuando entrará en vigor el decreto para su puesta en marcha. En un primer momento, se hará con dispositivos de Policía Municipal y Agentes de Movilidad de carácter informativo para hacer una transición hasta el control automático, que durante dos meses también tendrá carácter informativo.
En Madrid Central se eliminarán las calles de libre circulación y con ellas el tráfico de paso, ampliando el efecto de estas áreas en la reducción de emisiones contaminantes y dejando más espacio para el peatón, el transporte público y la bicicleta.
Madrid Central es la primera de las 30 medidas del Plan A de Calidad del Aire y Cambio Climático del Ayuntamiento de Madrid y una de las de mayor impacto para reducir la contaminación no solo en el centro, sino también en el resto de la ciudad.