La plaza de Cascorro y sus alrededores han estado tradicionalmente vinculados al Rastro por su cercanía con este mercadillo que se celebra todos los domingos del año sin excepción.

En la vecina plaza General Vara del Rey, en la calle Mira el Río Alta, Santa Ana o en la calle Bastero, se concentran algunas de las mejores almonedas de Madrid y lucen en sus escaparates muebles antiguos que muchos vecinos y visitantes se acercan a comprar o simplemente a admirar.

Son calles con mucho tránsito de peatones que se desplazan de una tienda a otra buscando chollos o tesoros y un reconocido punto de encuentro para curiosos y familias que eligen este barrio para pasear.

Pese al encanto de sus locales, de sus fachadas antiguas y de sus escaparates, cuentan con aceras estrechas y una accesibilidad mejorable. Por este motivo, se están acometiendo obras en la calle Santa Ana, que une la calle Toledo con la calle de la Ruda, para convertirla en una vía de plataforma única, con accesibilidad universal y prioridad peatonal.

Las actuaciones que se están llevando a cabo consisten en ampliar las aceras y sustituir los materiales existentes, colocando terrazo granallado en lugar de loseta hidráulica y adoquín prefabricado de hormigón en lugar del asfalto existente en la calzada.

Además se instalarán bolardos, papeleras y nuevas bocas de riego en una intervención que se alargará hasta finales del mes de octubre.

Se trata de una intervención que mejorará la movilidad en una calle de difícil tránsito para los peatones, para las sillas de ruedas o las sillas de bebé, que se veían obligados a circular en fila, y que a partir de ahora podrán desplazarse en paralelo o sin necesidad de invadir la calzada al haberse ensanchado el espacio destinado a aceras.