Tras varios meses de remover adoquines, tierras, escombros, de colocar nuevos suelos, bancos, arenas, maderas… en definitiva, pequeños tesoros, un nuevo jardín se abre en el corazón de Madrid. Por nombre se le ha dado Almendro3, tomado directamente de sus coordenadas, la íntima y recoleta calle del corazón del Madrid viejo.

Almendro3 es un jardín especial por varias razones, una de ellas que bajo él se halla la antigua muralla cristiana que cercaba Madrid entre los siglos XI y XII. Por este motivo, el Departamento de Patrimonio Histórico se interesó por el proyecto y junto con la Dirección General de Intervención en el Paisaje Urbano y el Patrimonio Cultural y el distrito Centro, han llevado a cabo su acondicionamiento. Las obras no han alterado este bien protegido, únicamente se ha resaltado mediante adoquinado el trazado por el que discurre para informar de su presencia.

Abandonado desde hacía más de 20 años, tapiado y acumulando suciedad y desechos en sus 740 metros cuadrados, el uso que podría tener el solar en un barrio con muy pocas zonas de recreo era una inquietud latente entre los vecinos. Había llegado a ser, junto con la finca vecina, apuntalada también desde tiempo inmemorial, el sello de identidad del abandono de la propia calle Almendro, que es, al decir del concejal del Distrito Centro, Jorge García Castaño, «una de las calles más bonitas de Madrid».

Para evitar la degradación de la calle y del propio solar, propiedad de la Empresa Municipal de Vivienda y Suelo, el Ayuntamiento de Madrid abrió a finales de 2015 un proceso participativo para que fueran los vecinos y las asociaciones de madres y padres de alumnos de los colegios públicos cercanos quienes decidieran qué hacer en este solar. «Participar en el diseño de un espacio público fortalece nuestro vínculo con él y propicia que nos involucremos en su cuidado y mantenimiento. Por otra parte, los colegios de la zona no son colegios grandes, tienen entornos muy colmatados, y este solar les puede servir para hacer muchas cosas», dijo entonces el concejal Jorge García Castaño.

Durante el último año y en estrecha colaboración con el distrito Centro, algunas madres, padres y vecinas fueron abriendo y acondicionando el espacio para uso y disfrute del barrio y de los centros escolares cercanos; al tiempo que propiciaron una pequeña intervención para tener un nuevo jardín preparado para todos, diseñando cómo y de qué manera deseaban que fuera transformado el solar. El siguiente paso fue convertirlo en un vergel, repoblándolo con diversas especies.

Una vez acondicionado el nuevo espacio, el pasado 25 de abril compartimos en este encantador rincón la primera hora de la tarde con los vecinos y vecinas para celebrar la puesta de largo de Almendro 3. En el acto estuvieron el concejal de Centro, Jorge García Castaño, la directora general de Intervención en el Paisaje Urbano y el Patrimonio Cultural del Ayuntamiento de Madrid, Marisol Mena, y representantes de las asociaciones de vecinos y de madres y padres de alumnos.

El nuevo jardín está protegido por una balaustrada metálica, reutilizada del antiguo mercado temporal de Barceló, que permite la visión del interior. Si quieres disfrutarlo, casi cada tarde, a la hora de salida de los colegios, las madres y padres se encargan de abrirlo. Para alguna visita puntual puedes ponerte en contacto con cultucentro@madrid.es

Si Almendro ya era una calle muy peculiar, ahora se convierte en uno de los espacios más pintorescos y románticos de la zona.